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M’Cheyne Bible Reading Plan

The classic M'Cheyne plan--read the Old Testament, New Testament, and Psalms or Gospels every day.
Duration: 365 days
Reina-Valera Antigua (RVA)
Version
Deuteronomio 18

18 LOS sacerdotes Levitas, toda la tribu de Leví, no tendrán parte ni heredad con Israel; de las ofrendas encendidas á Jehová, y de la heredad de él comerán.

No tendrán, pues, heredad entre sus hermanos: Jehová es su heredad, como él les ha dicho.

Y este será el derecho de los sacerdotes de parte del pueblo, de los que ofrecieren en sacrificio buey ó cordero: darán al sacerdote la espalda, y las quijadas, y el cuajar.

Las primicias de tu grano, de tu vino, y de tu aceite, y las primicias de la lana de tus ovejas le darás:

Porque le ha escogido Jehová tu Dios de todas tus tribus, para que esté para ministrar al nombre de Jehová, él y sus hijos para siempre.

Y cuando el Levita saliere de alguna de tus ciudades de todo Israel, donde hubiere peregrinado, y viniere con todo deseo de su alma al lugar que Jehová escogiere,

Ministrará al nombre de Jehová su Dios, como todos sus hermanos los Levitas que estuvieren allí delante de Jehová.

Porción como la porción de los otros comerán, además de sus patrimonios.

Cuando hubieres entrado en la tierra que Jehová tu Dios te da, no aprenderás á hacer según las abominaciones de aquellas gentes.

10 No sea hallado en ti quien haga pasar su hijo ó su hija por el fuego, ni practicante de adivinaciones, ni agorero, ni sortílego, ni hechicero,

11 Ni fraguador de encantamentos, ni quien pregunte á pitón, ni mágico, ni quien pregunte á los muertos.

12 Porque es abominación á Jehová cualquiera que hace estas cosas, y por estas abominaciones Jehová tu Dios las echó de delante de ti.

13 Perfecto serás con Jehová tu Dios.

14 Porque estas gentes que has de heredar, á agoreros y hechiceros oían: mas tú, no así te ha dado Jehová tu Dios.

15 Profeta de en medio de ti, de tus hermanos, como yo, te levantará Jehová tu Dios: á él oiréis:

16 Conforme á todo lo que pediste á Jehová tu Dios en Horeb el día de la asamblea, diciendo: No vuelva yo á oir la voz de Jehová mi Dios, ni vea yo más este gran fuego, porque no muera.

17 Y Jehová me dijo: Bien han dicho.

18 Profeta les suscitaré de en medio de sus hermanos, como tú; y pondré mis palabras en su boca, y él les hablará todo lo que yo le mandare.

19 Mas será, que cualquiera que no oyere mis palabras que él hablare en mi nombre, yo le residenciaré.

20 Empero el profeta que presumiere hablar palabra en mi nombre, que yo no le haya mandado hablar, ó que hablare en nombre de dioses ajenos, el tal profeta morirá.

21 Y si dijeres en tu corazón: ¿Cómo conoceremos la palabra que Jehová no hubiere hablado?

22 Cuando el profeta hablare en nombre de Jehová, y no fuere la tal cosa, ni viniere, es palabra que Jehová no ha hablado: con soberbia la habló aquel profeta: no tengas temor de él.

Salmos 105

105 ALABAD á Jehová, invocad su nombre. Haced notorias sus obras en los pueblos.

Cantadle, cantadle salmos: Hablad de todas sus maravillas.

Gloriaos en su santo nombre: Alégrese el corazón de los que buscan á Jehová.

Buscad á Jehová, y su fortaleza: Buscad siempre su rostro.

Acordaos de sus maravillas que hizo, De sus prodigios y de los juicios de su boca,

Oh vosotros, simiente de Abraham su siervo, Hijos de Jacob, sus escogidos.

El es Jehová nuestro Dios; En toda la tierra son sus juicios.

Acordóse para siempre de su alianza; De la palabra que mandó para mil generaciones,

La cual concertó con Abraham; Y de su juramento á Isaac.

10 Y establecióla á Jacob por decreto, A Israel por pacto sempiterno,

11 Diciendo: A ti daré la tierra de Canaán Por cordel de vuestra heredad.

12 Esto siendo ellos pocos hombres en número, Y extranjeros en ella.

13 Y anduvieron de gente en gente, De un reino á otro pueblo.

14 No consintió que hombre los agraviase; Y por causa de ellos castigó los reyes.

15 No toquéis, dijo, á mis ungidos, Ni hagáis mal á mis profetas.

16 Y llamó al hambre sobre la tierra, Y quebrantó todo mantenimiento de pan.

17 Envió un varón delante de ellos, A José, que fué vendido por siervo.

18 Afligieron sus pies con grillos; En hierro fué puesta su persona.

19 Hasta la hora que llegó su palabra, El dicho de Jehová le probó.

20 Envió el rey, y soltóle; El señor de los pueblos, y desatóle.

21 Púsolo por señor de su casa, Y por enseñoreador en toda su posesión;

22 Para que reprimiera á sus grandes como él quisiese, Y á sus ancianos enseñara sabiduría.

23 Después entró Israel en Egipto, Y Jacob fué extranjero en la tierra de Châm.

24 Y multiplicó su pueblo en gran manera, E hízolo fuerte más que sus enemigos.

25 Volvió el corazón de ellos para que aborreciesen á su pueblo, Para que contra sus siervos pensasen mal.

26 Envió á su siervo Moisés, Y á Aarón al cual escogió.

27 Pusieron en ellos las palabras de sus señales, Y sus prodigios en la tierra de Châm.

28 Echó tinieblas, é hizo oscuridad; Y no fueron rebeldes á su palabra.

29 Volvió sus aguas en sangre, Y mató sus pescados.

30 Produjo su tierra ranas, Aun en las cámaras de sus reyes.

31 Dijo, y vinieron enjambres de moscas, Y piojos en todo su término.

32 Volvió en su tierra sus lluvias en granizo, Y en fuego de llamaradas.

33 E hirió sus viñas y sus higueras, Y quebró los árboles de su término.

34 Dijo, y vinieron langostas, Y pulgón sin número;

35 Y comieron toda la hierba de su país, Y devoraron el fruto de su tierra.

36 Hirió además á todos los primogénitos en su tierra, El principio de toda su fuerza.

37 Y sacólos con plata y oro; Y no hubo en sus tribus enfermo.

38 Egipto se alegró de que salieran; Porque su terror había caído sobre ellos.

39 Extendió una nube por cubierta, Y fuego para alumbrar la noche.

40 Pidieron, é hizo venir codornices; Y saciólos de pan del cielo.

41 Abrió la peña, y fluyeron aguas; Corrieron por los secadales como un río.

42 Porque se acordó de su santa palabra, Dada á Abraham su siervo.

43 Y sacó á su pueblo con gozo; Con júbilo á sus escogidos.

44 Y dióles las tierras de las gentes; Y las labores de las naciones heredaron:

45 Para que guardasen sus estatutos, Y observasen sus leyes. Aleluya.

Isaías 45

45 ASI dice Jehová á su ungido, á Ciro, al cual tomé yo por su mano derecha, para sujetar gentes delante de él y desatar lomos de reyes; para abrir delante de él puertas, y las puertas no se cerrarán:

Yo iré delante de ti, y enderezaré las tortuosidades; quebrantaré puertas de bronce, y cerrojos de hierro haré pedazos;

Y te daré los tesoros escondidos, y los secretos muy guardados; para que sepas que yo soy Jehová, el Dios de Israel, que te pongo nombre.

Por amor de mi siervo Jacob, y de Israel mi escogido, te llamé por tu nombre; púsete sobrenombre, aunque no me conociste.

Yo Jehová, y ninguno más hay: no hay Dios fuera de mí. Yo te ceñiré, aunque tú no me conociste;

Para que se sepa desde el nacimiento del sol, y desde donde se pone, que no hay más que yo; yo Jehová, y ninguno más que yo:

Que formo la luz y crío las tinieblas, que hago la paz y crío el mal. Yo Jehová que hago todo esto.

Rociad, cielos, de arriba, y las nubes destilen la justicia; ábrase la tierra, y prodúzcanse la salud y la justicia; háganse brotar juntamente. Yo Jehová lo crié.

Ay del que pleitea con su Hacedor! ­el tiesto con los tiestos de la tierra! ¿Dirá el barro al que lo labra: Qué haces; ó tu obra: No tiene manos?

10 Ay del que dice al padre: ¿Por qué engendraste? y á la mujer: ¿Por qué pariste?

11 Así dice Jehová, el Santo de Israel, y su Formador: Preguntadme de las cosas por venir; mandadme acerca de mis hijos, y acerca de la obra de mis manos.

12 Yo hice la tierra, y crié sobre ella al hombre. Yo, mis manos, extendieron los cielos, y á todo su ejército mandé.

13 Yo lo desperté en justicia, y enderezaré todos sus caminos; él edificará mi ciudad, y soltará mis cautivos, no por precio ni por dones, dice Jehová de los ejércitos.

14 Así dice Jehová: El trabajo de Egipto, las mercaderías de Etiopía, y los Sabeos hombres agigantados, se pasarán á ti, y serán tuyos; irán en pos de ti, pasarán con grillos: á ti harán reverencia, y á ti suplicarán, diciendo: Cierto, en ti está Dios, y no hay otro fuera de Dios.

15 Verdaderamente tú eres Dios que te encubres, Dios de Israel, que salvas.

16 Confusos y avergonzados serán todos ellos; irán con afrenta todos los fabricadores de imágenes.

17 Israel es salvo en Jehová con salud eterna; no os avergonzaréis, ni os afrentaréis, por todos los siglos.

18 Porque así dijo Jehová, que crió los cielos, él es Dios, el que formó la tierra, el que la hizo y la compuso; no la crió en vano, para que fuese habitada la crió: Yo Jehová, y ninguno más que yo.

19 No hablé en escondido, en lugar de tierra de tinieblas; no dije á la generación de Jacob: En vano me buscáis. Yo soy Jehová que hablo justicia, que anuncio rectitud.

20 Reuníos, y venid; allegaos, todos los escapados de las gentes: no saben aquellos que erigen el madero de su escultura, y los que ruegan al dios que no salva.

21 Publicad, y haced llegar, y entren todos en consulta: ¿quién hizo oir esto desde el principio, y lo tiene dicho desde entonces, sino yo Jehová? Y no hay más Dios que yo; Dios justo y Salvador: ningún otro fuera de mí.

22 Mirad á mí, y sed salvos, todos los términos de la tierra: porque yo soy Dios, y no hay más.

23 Por mí hice juramento, de mi boca salió palabra en justicia, y no será revocada. Que á mí se doblará toda rodilla, jurará toda lengua.

24 Y diráse de mí: Ciertamente en Jehová está la justicia y la fuerza: á él vendrán, y todos los que contra él se enardecen, serán avergonzados.

25 En Jehová será justificada y se gloriará toda la generación de Israel.

Apocalipsis 15

15 Y VI otra señal en el cielo, grande y admirable, que era siete ángeles que tenían las siete plagas postreras; porque en ellas es consumada la ira de Dios.

Y vi así como un mar de vidrio mezclado con fuego; y los que habían alcanzado la victoria de la bestia, y de su imagen, y de su señal, y del número de su nombre, estar sobre el mar de vidrio, teniendo las arpas de Dios.

Y cantan el cántico de Moisés siervo de Dios, y el cántico del Cordero, diciendo: Grandes y maravillosas son tus obras, Señor Dios Todopoderoso; justos y verdaderos son tus caminos, Rey de los santos.

¿Quién no te temerá, oh Señor, y engrandecerá tu nombre? porque tú sólo eres santo; por lo cual todas las naciones vendrán, y adorarán delante de ti, porque tus juicios son manifestados.

Y después de estas cosas miré, y he aquí el templo del tabernáculo del testimonio fué abierto en el cielo;

Y salieron del templo siete ángeles, que tenían siete plagas, vestidos de un lino limpio y blanco, y ceñidos alrededor de los pechos con bandas de oro.

Y uno de los cuatro animales dió á los siete ángeles siete copas de oro, llenas de la ira de Dios, que vive para siempre jamás.

Y fué el templo lleno de humo por la majestad de Dios, y por su potencia; y ninguno podía entrar en el templo, hasta que fuesen consumadas las siete plagas de los siete ángeles.