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Read the Gospels in 40 Days

Read through the four Gospels--Matthew, Mark, Luke, and John--in 40 days.
Duration: 40 days
Nueva Biblia de las Américas (NBLA)
Version
Juan 7-8

La fiesta de los Tabernáculos

Después de esto, Jesús andaba por Galilea(A), pues no deseaba andar por Judea porque los judíos(B) lo querían matar(C). La fiesta de los judíos, la de los Tabernáculos(D), estaba cerca. Por eso los hermanos de Jesús(E) le dijeron: «Sal de aquí, y vete a Judea para que también Tus discípulos(F) vean las obras que Tú haces. Porque nadie hace nada en secreto cuando[a] procura ser conocido en público. Si haces estas cosas, muéstrate al mundo». Porque ni aun Sus hermanos(G) creían en Él.

Entonces Jesús les dijo*: «Mi tiempo aún no ha llegado(H), pero el tiempo de ustedes es siempre oportuno. El mundo no puede odiarlos a ustedes, pero me odia a Mí(I), porque Yo doy testimonio de él, que sus acciones son malas(J). Suban ustedes a la fiesta; Yo no subo a esta fiesta porque Mi tiempo aún no se ha cumplido(K)».

Y habiéndoles dicho esto, se quedó en Galilea.

Jesús sube a la fiesta en secreto

10 Pero cuando Sus hermanos(L) subieron a la fiesta, entonces Jesús también subió; no abiertamente, sino en[b] secreto. 11 Por eso los judíos(M) lo buscaban en la fiesta(N) y decían: «¿Dónde está Ese?».

12 Y había mucha murmuración entre la gente acerca de Él. Unos decían: «Él es bueno». Otros decían: «No, al contrario, extravía a la gente(O)». 13 Sin embargo, nadie hablaba abiertamente de Él por miedo a los judíos(P).

Jesús enseña durante la fiesta

14 A la mitad de la fiesta, Jesús subió al templo y se puso a enseñar(Q). 15 Entonces los judíos(R) se maravillaban, diciendo: «¿Cómo puede Este saber de letras(S) sin haber estudiado?».

16 Jesús entonces les respondió: «Mi enseñanza(T) no es Mía, sino del que me envió. 17 Si alguno está dispuesto a hacer la voluntad de Dios, sabrá si Mi enseñanza es de Dios o si hablo de Mí mismo(U). 18 El que habla de sí mismo busca su propia gloria; pero Aquel que busca la gloria del que lo envió(V), Él es verdadero y no hay injusticia en Él. 19 ¿No les dio Moisés la ley(W), y sin embargo ninguno de ustedes la cumple[c]? ¿Por qué me quieren matar(X)?».

20 La multitud contestó: «¡Tienes un demonio(Y)! ¿Quién te quiere matar?». 21 Jesús les respondió: «Una sola obra hice(Z) y todos se admiran. 22 Por eso Moisés les ha dado la circuncisión(AA) (no porque sea de Moisés, sino de los padres(AB)), y en el día de reposo ustedes circuncidan al hombre. 23 Y si para no violar la ley de Moisés un hombre recibe la circuncisión aún en el día de reposo(AC), ¿por qué están enojados conmigo porque sané por completo a un hombre en el día de reposo? 24 No juzguen por la apariencia, sino juzguen con[d] juicio justo(AD)».

25 Entonces algunos de Jerusalén decían: «¿No es Este al que procuran matar? 26 Y vean, habla en público y no le dicen nada. ¿No será que en verdad los gobernantes(AE) reconocen que Este es el Cristo[e]? 27 Sin embargo, nosotros sabemos de dónde es Este; pero cuando venga el Cristo, nadie sabrá de dónde es(AF)».

28 Jesús entonces, mientras enseñaba(AG) en el templo, exclamó en alta voz: «Ustedes me conocen y saben de dónde soy(AH). Yo no he venido por decisión propia(AI), pero Aquel que me envió es verdadero, a quien ustedes no conocen. 29 Yo lo conozco(AJ), porque procedo de Él(AK), y Él me envió(AL)».

30 Procuraban, pues, prender a Jesús(AM); pero nadie le echó mano porque todavía no había llegado Su hora(AN). 31 Pero muchos de la multitud creyeron en Él(AO), y decían: «Cuando el Cristo(AP) venga, ¿acaso hará más señales[f](AQ) que las que Este ha hecho?».

32 Los fariseos oyeron a la multitud murmurando estas cosas acerca de Él. Entonces los principales sacerdotes y los fariseos enviaron guardias(AR) para que lo prendieran(AS). 33 Pero Jesús dijo: «Por un poco más de tiempo estoy con ustedes(AT); después voy a Aquel que me envió(AU). 34 Me buscarán y no me hallarán; y donde Yo esté, ustedes no pueden ir(AV)».

35 Decían entonces los judíos(AW) entre sí: «¿Adónde piensa irse Este(AX) que no lo podamos encontrar? ¿Será acaso que quiere irse a la dispersión(AY) entre los griegos(AZ) y enseñar a los griegos? 36 ¿Qué quiere decir esto que ha dicho: “Me buscarán y no me hallarán; y donde Yo esté, ustedes no podrán ir(BA)”?».

La gran invitación

37 En el último día, el gran día de la fiesta(BB), Jesús puesto en pie, exclamó en alta voz: «Si alguien tiene sed, que venga a Mí y beba[g](BC). 38 El que cree en Mí, como ha dicho la Escritura: “De lo más profundo de su ser[h] brotarán ríos de agua(BD) viva(BE)”». 39 Pero Él decía esto del Espíritu(BF), que los que habían creído en Él habían de recibir; porque el Espíritu no había sido dado todavía[i](BG), pues Jesús aún no había sido glorificado(BH).

40 Entonces algunos de la multitud, cuando oyeron estas palabras, decían: «Verdaderamente Este es el Profeta(BI)». 41 Otros decían: «Este es el Cristo[j]». Pero otros decían: «¿Acaso el Cristo ha de venir de Galilea(BJ)? 42 ¿No ha dicho la Escritura que el Cristo viene de la descendencia de David, y de Belén(BK), la aldea de donde era David?». 43 Así que surgió una división(BL) entre la multitud por causa de Él. 44 Y algunos de ellos querían prender a Jesús, pero nadie le echó mano(BM).

Los guardias confundidos

45 Entonces los guardias(BN) vinieron a los principales sacerdotes y fariseos, y estos les dijeron: «¿Por qué no lo trajeron?». 46 Los guardias(BO) respondieron: «¡Jamás hombre alguno ha hablado como este hombre habla(BP)!».

47 Entonces los fariseos les contestaron: «¿Es que también ustedes se han dejado engañar(BQ)? 48 ¿Acaso ha creído en Él alguien de los gobernantes(BR) o de los fariseos? 49 Pero esta multitud que no conoce de la ley, maldita es».

50 Nicodemo(BS), el que había venido a Jesús antes, y que era uno de ellos, les dijo*: 51 «¿Acaso juzga nuestra ley a un hombre a menos que le oiga primero(BT) y sepa lo que hace?». 52 Ellos le respondieron: «¿Es que tú también eres de Galilea(BU)? Investiga, y verás que ningún profeta sale de Galilea». 53 [k]Y cada uno se fue a su casa.

La mujer sorprendida en adulterio

Pero Jesús se fue al monte de los Olivos(BV). Al amanecer, vino otra vez al templo, y todo el pueblo venía a Él; y sentándose, les enseñaba(BW). Los escribas y los fariseos trajeron* a una mujer sorprendida en adulterio, y poniéndola en medio, dijeron* a Jesús: «Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en el acto mismo del adulterio. Y en la ley, Moisés nos ordenó apedrear a esta clase de mujeres(BX). ¿Tú, pues, qué dices?».

Decían esto, poniendo a prueba a Jesús(BY), para tener de qué acusarlo(BZ). Pero Jesús se inclinó y con el dedo escribía en la tierra. Pero como insistían en preguntar, Jesús se enderezó(CA) y les dijo: «El que de ustedes esté sin pecado, sea el primero(CB) en tirarle una piedra(CC)».

E inclinándose de nuevo, escribía en la tierra. Al oír ellos esto, se fueron retirando uno a uno comenzando por los de mayor edad, y dejaron solo a Jesús y a la mujer que estaba en medio. 10 Enderezándose(CD) Jesús, le dijo: «Mujer, ¿dónde están ellos? ¿Ninguno te ha condenado?».

11 «Ninguno, Señor», respondió ella. Entonces Jesús le dijo: «Yo tampoco te condeno(CE). Vete; y desde ahora no peques más(CF)».

Jesús, la Luz del mundo

12 Jesús les habló otra vez, diciendo: «Yo soy la Luz del mundo(CG); el que me sigue no andará en tinieblas, sino que tendrá la Luz(CH) de la vida». 13 Entonces los fariseos le dijeron: «Tú das testimonio de Ti mismo; Tu testimonio no es verdadero[l](CI)».

14 Jesús les respondió: «Aunque Yo doy testimonio(CJ) de Mí mismo, Mi testimonio es verdadero, porque Yo sé de dónde he venido y adónde voy(CK); pero ustedes no saben de dónde vengo(CL) ni adónde voy. 15 Ustedes juzgan según la carne[m](CM); Yo no juzgo a nadie(CN). 16 Pero si Yo juzgo, Mi juicio es verdadero; porque no soy Yo solo, sino Yo y el Padre que[n] me envió(CO). 17 Aun en la ley de ustedes está escrito que el testimonio de dos hombres es verdadero(CP). 18 Yo soy el que doy testimonio de Mí mismo, y el Padre que me envió da testimonio de Mí(CQ)».

19 Entonces le decían: «¿Dónde está Tu Padre?». «Ustedes no me conocen a Mí ni a Mi Padre», les respondió Jesús. «Si me conocieran, conocerían también a Mi Padre(CR)».

20 Estas palabras las pronunció en el lugar del tesoro(CS), cuando enseñaba en el templo(CT); y nadie lo prendió, porque todavía no había llegado Su hora(CU).

Advertencias a los incrédulos

21 Entonces Jesús les dijo de nuevo: «Yo me voy, y me buscarán(CV), y ustedes morirán en su pecado(CW); adonde Yo voy, ustedes no pueden ir». 22 Por eso los judíos(CX) decían: «¿Acaso se va a suicidar, puesto que dice: “Adonde Yo voy, ustedes no pueden ir(CY)”?».

23 Y Jesús les decía: «Ustedes son de abajo, Yo soy de arriba(CZ); ustedes son de este mundo(DA), Yo no soy de este mundo(DB). 24 Por eso les dije que morirán en sus pecados; porque si no creen que Yo soy[o](DC), morirán en sus pecados(DD)».

25 «¿Tú quién eres?», le preguntaron. Jesús les contestó: «¿Qué les he estado diciendo desde el principio[p]? 26 Tengo mucho que decir y juzgar de ustedes, pero Aquel que me envió es veraz(DE); y Yo, las cosas que oí de Él, estas digo al mundo(DF)».

27 Ellos no comprendieron que les hablaba del Padre. 28 Por eso Jesús les dijo: «Cuando ustedes levanten al Hijo del Hombre(DG), entonces sabrán que Yo soy[q](DH) y que no hago nada por Mi cuenta(DI), sino que hablo estas cosas como el Padre me enseñó. 29 Y Aquel que me envió está conmigo; no me ha dejado[r] solo(DJ), porque Yo siempre hago lo que le agrada(DK)». 30 Al hablar estas cosas, muchos creyeron en Él(DL).

Los verdaderos hijos de Abraham

31 Entonces Jesús decía a los judíos que habían creído en Él: «Si ustedes permanecen en Mi palabra(DM), verdaderamente son Mis discípulos(DN); 32 y conocerán la verdad(DO), y la verdad los hará libres(DP)». 33 Ellos le contestaron: «Somos descendientes de Abraham(DQ) y nunca hemos sido esclavos de nadie. ¿Cómo dices Tú: “Serán libres”?».

34 Jesús les respondió: «En verdad les digo que todo el que comete pecado es esclavo del pecado(DR); 35 y el esclavo no queda en la casa para siempre(DS); el hijo permanece para siempre(DT). 36 Así que, si el Hijo los hace libres(DU), ustedes serán realmente libres. 37 Sé que ustedes son descendientes de Abraham(DV); y sin embargo, me quieren matar(DW) porque Mi palabra no tiene aceptación en ustedes[s]. 38 Yo hablo lo que he visto con Mi Padre[t]; ustedes, entonces, hacen también lo que oyeron de su padre(DX)».

39 Ellos le contestaron: «Abraham es nuestro padre(DY)». Jesús les dijo*: «Si son hijos de Abraham(DZ), hagan las obras de Abraham. 40 Pero ahora me quieren matar(EA), a Mí[u] que les he dicho la verdad que oí de Dios(EB). Esto no lo hizo Abraham. 41 Ustedes hacen las obras de su padre(EC)». Ellos le dijeron: «Nosotros no nacimos de fornicación; tenemos un Padre, es decir, Dios(ED)».

42 Jesús les dijo: «Si Dios fuera su Padre, me amarían(EE), porque Yo salí de Dios y vine de Él(EF), pues no he venido por Mi propia iniciativa(EG), sino que Él[v] me envió(EH). 43 ¿Por qué no entienden lo que digo[w](EI)? Porque no pueden oír Mi palabra(EJ).

44 »Ustedes son de su padre el diablo y quieren hacer los deseos de su padre(EK). Él fue un asesino desde el principio(EL), y no se ha mantenido en la verdad porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira[x], habla de su propia naturaleza(EM), porque es mentiroso(EN) y el padre de la mentira[y]. 45 Pero porque Yo digo la verdad(EO), no me creen. 46 ¿Quién de ustedes me prueba que tengo pecado? Y si digo verdad(EP), ¿por qué ustedes no me creen? 47 El que es de Dios escucha las palabras de Dios; por eso ustedes no escuchan, porque no son de Dios(EQ)».

Jesús, anterior a Abraham

48 Los judíos(ER) le contestaron: «¿No decimos con razón que Tú eres samaritano(ES) y que tienes un demonio(ET)?». 49 Jesús respondió: «Yo no tengo ningún demonio(EU), sino que honro a Mi Padre, y ustedes me deshonran a Mí. 50 Pero Yo no busco Mi gloria(EV); hay Uno que la busca, y juzga. 51 En verdad les digo que si alguien guarda Mi palabra(EW), no verá jamás la muerte(EX)».

52 Los judíos(EY) le dijeron: «Ahora sí sabemos que tienes un demonio(EZ). Abraham murió, y también los profetas, y Tú dices: “Si alguien guarda Mi palabra(FA) no probará jamás la muerte(FB)”. 53 ¿Eres Tú acaso mayor que nuestro padre(FC) Abraham que murió? Los profetas también murieron; ¿quién crees que eres?[z]».

54 Jesús respondió: «Si Yo mismo me glorifico(FD), Mi gloria no es nada; es Mi Padre el que me glorifica(FE), de quien ustedes dicen: “Él es nuestro Dios”. 55 Ustedes no lo han conocido(FF), pero Yo lo conozco; y si digo que no lo conozco seré un mentiroso como ustedes(FG); pero lo conozco(FH) y guardo Su palabra(FI). 56 Abraham, el padre de ustedes(FJ), se regocijó esperando ver[aa] Mi día; y lo vio y se alegró(FK)».

57 Por esto los judíos(FL) le dijeron: «Aún no tienes cincuenta años, ¿y has visto a Abraham?». 58 Jesús les dijo: «En verdad les digo, que antes que Abraham naciera[ab], Yo soy(FM)». 59 Entonces tomaron piedras para tirárselas(FN), pero Jesús se ocultó[ac](FO) y salió del templo[ad].

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