Read the Gospels in 40 Days
Prólogo
1 En el principio(A) ya existía[a] el Verbo[b](B), y el Verbo estaba con Dios(C), y el Verbo era Dios(D). 2 Él[c] estaba en el principio con Dios. 3 Todas las cosas fueron hechas por medio de Él(E), y sin Él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho. 4 En Él estaba la vida(F), y la vida era la Luz de los hombres(G). 5 La Luz brilla en las tinieblas(H), y las tinieblas no la comprendieron.
6 Vino al mundo un[d] hombre enviado por Dios, cuyo nombre era Juan(I). 7 Este vino como testigo(J) para testificar de la Luz, a fin de que todos creyeran por medio de él(K). 8 No era él[e] la Luz(L), sino que vino para dar testimonio de la Luz.
9 Existía[f] la Luz verdadera(M) que, al venir al mundo, alumbra a todo hombre[g].
10 Él estaba en el mundo, y el mundo fue hecho por medio de Él(N), y el mundo no lo conoció. 11 A lo Suyo vino, y los Suyos no lo recibieron. 12 Pero a todos los que lo recibieron, les dio el derecho de llegar a ser hijos de Dios(O), es decir, a los que creen en Su nombre(P), 13 que no nacieron[h] de sangre[i], ni de la voluntad de la carne, ni de la voluntad del hombre, sino de Dios(Q).
El Verbo se hace carne
14 El Verbo(R) se hizo carne(S), y habitó entre nosotros(T), y vimos Su gloria(U), gloria como del unigénito del Padre, lleno de gracia(V) y de verdad(W). 15 Juan dio* testimonio de Él(X) y clamó: «Este era del que yo decía: “El que viene después de mí(Y), es antes de mí[j], porque era primero que yo(Z)”». 16 Pues de Su plenitud(AA) todos hemos recibido, y gracia sobre gracia. 17 Porque la ley fue dada por medio de Moisés(AB); la gracia(AC) y la verdad(AD) fueron hechas realidad por medio de Jesucristo[k]. 18 Nadie ha visto jamás a Dios(AE); el unigénito Dios[l](AF), que está en el seno del Padre(AG), Él lo ha dado a conocer(AH).
Testimonio de Juan el Bautista
19 Este es el testimonio(AI) de Juan, cuando los judíos(AJ) enviaron sacerdotes y levitas de Jerusalén(AK) a preguntarle: «¿Quién eres tú?». 20 Y él confesó y no negó, pero confesó: «Yo no soy el Cristo[m](AL)». 21 «¿Entonces, qué?», le preguntaron, «¿Eres Elías(AM)?». Y él dijo*: «No lo soy». «¿Eres el Profeta(AN)?». «No», respondió Juan. 22 Entonces le preguntaron: «¿Quién eres? Ya que tenemos que dar respuesta a los que nos enviaron. ¿Qué dices de ti mismo?». 23 Juan les respondió: «Yo soy la voz del que clama en el desierto: “Enderecen el camino del Señor(AO)”, como dijo el profeta Isaías(AP)».
24 Los que habían sido enviados eran de los fariseos, 25 y le preguntaron: «Entonces, ¿por qué bautizas, si tú no eres el Cristo[n], ni Elías, ni el Profeta(AQ)?».
26 Juan les respondió: «Yo bautizo en[o] agua(AR), pero entre ustedes está Uno a quien ustedes no conocen. 27 Él es el que viene después de mí(AS), a quien yo no soy digno de desatar la correa de la sandalia(AT)».
28 Estas cosas sucedieron en Betania[p], al otro lado del Jordán, donde Juan estaba bautizando(AU).
El Cordero de Dios
29 Al día siguiente Juan vio* a Jesús que venía hacia él, y dijo*: «Ahí está el Cordero de Dios(AV) que quita el pecado del mundo(AW). 30 Este es Aquel de quien yo dije: “Después de mí viene un Hombre(AX) que es antes de mí[q] porque era primero que yo(AY)”. 31 Yo no lo conocía[r], pero para que Él fuera manifestado a Israel, por esto yo vine bautizando en[s] agua».
32 Juan también dio testimonio(AZ), diciendo: «He visto al Espíritu que descendía del cielo como paloma(BA), y se posó sobre Él. 33 Yo no lo conocía[t], pero el que me envió a bautizar en[u] agua me dijo: “Aquel sobre quien veas al Espíritu descender y posarse sobre Él, Este es el que bautiza en[v] el Espíritu Santo(BB)”. 34 Y yo lo he visto y he dado testimonio de que Este es el Hijo de Dios(BC)».
Los primeros discípulos
35 Al día siguiente(BD) Juan estaba otra vez allí con[w] dos de sus discípulos, 36 y vio a Jesús que pasaba, y dijo*: «Ahí está el Cordero de Dios(BE)». 37 Y los dos discípulos le oyeron hablar, y siguieron a Jesús. 38 Jesús se volvió, y viendo que lo seguían, les dijo*: «¿Qué buscan?». Y ellos le dijeron: «Rabí(BF) (que traducido quiere decir Maestro), ¿dónde te hospedas?». 39 «Vengan y verán», les dijo* Jesús. Entonces fueron y vieron dónde se hospedaba; y se quedaron con Él aquel día, porque eran como las cuatro de la tarde[x].
40 (BG)Uno de los dos que oyeron a Juan y siguieron a Jesús, era Andrés, hermano de Simón Pedro. 41 Él encontró* primero a su hermano Simón, y le dijo*: «Hemos hallado al Mesías(BH)» (que traducido quiere decir, Cristo). 42 Entonces lo trajo a Jesús. Jesús mirándolo, dijo: «Tú eres Simón, hijo de Juan[y](BI); tú serás llamado Cefas(BJ)», que quiere decir Pedro[z](BK).
Felipe y Natanael
43 Al día siguiente(BL) Jesús se propuso salir para Galilea(BM), y encontró* a Felipe(BN), y le dijo*: «Sígueme(BO)». 44 Felipe(BP) era de Betsaida(BQ), de la ciudad de Andrés y de Pedro. 45 Felipe(BR) encontró* a Natanael(BS) y le dijo*: «Hemos hallado a Aquel de quien escribió Moisés en la ley, y también los profetas(BT), a Jesús de Nazaret(BU), el hijo de José(BV)». 46 Y Natanael le dijo: «¿Puede algo bueno salir de Nazaret(BW)?». «Ven, y ve», le dijo* Felipe(BX).
47 Jesús vio venir a Natanael y dijo* de él: «Ahí tienen a un verdadero israelita(BY) en quien no hay engaño». 48 Natanael le preguntó*: «¿Cómo es que me conoces?». Jesús le respondió: «Antes de que Felipe(BZ) te llamara, cuando estabas debajo de la higuera, te vi». 49 «Rabí(CA), Tú eres el Hijo de Dios(CB), Tú eres el Rey de Israel(CC)», respondió Natanael.
50 Jesús le contestó: «¿Porque te dije que te vi debajo de la higuera, crees? Cosas mayores que estas verás». 51 También le dijo*: «En verdad les digo que verán el cielo abierto(CD) y a los ángeles de Dios subiendo y bajando(CE) sobre el Hijo del Hombre(CF)».
La boda de Caná
2 Al tercer día(CG) se celebró una boda en Caná de Galilea(CH), y estaba allí la madre de Jesús(CI); 2 y también Jesús fue invitado a la boda, con[aa] Sus discípulos(CJ). 3 Cuando se acabó el vino, la madre de Jesús le dijo*: «No tienen vino». 4 Y Jesús le dijo*: «Mujer(CK), ¿qué nos interesa esto a ti y a Mí(CL)? Todavía no ha llegado Mi hora(CM)». 5 Su madre(CN) dijo* a los que servían: «Hagan todo lo que Él les diga».
6 Y había allí seis tinajas de piedra, puestas para ser usadas en el rito de la purificación de los judíos(CO); en cada una cabían dos o tres cántaros[ab]. 7 Jesús les dijo*: «Llenen de agua las tinajas». Y las llenaron hasta el borde. 8 Entonces les dijo*: «Saquen ahora un poco y llévenlo al mayordomo». Y se lo llevaron. 9 El mayordomo probó el agua convertida en vino(CP), sin saber de dónde era, pero los que servían, que habían sacado el agua, lo sabían. Entonces el mayordomo llamó* al novio, 10 y le dijo*: «Todo hombre sirve primero el vino bueno, y cuando ya han tomado bastante(CQ), entonces el inferior; pero tú has guardado hasta ahora el vino bueno».
11 Este principio de Sus señales[ac](CR) hizo Jesús en Caná de Galilea(CS), y manifestó Su gloria(CT), y Sus discípulos creyeron en Él.
12 Después de esto Jesús bajó a Capernaúm(CU) con Su madre, Sus hermanos(CV) y Sus discípulos(CW); pero no se quedaron allí muchos días.
Jesús echa a los mercaderes del templo
13 La Pascua de los judíos estaba cerca(CX), y Jesús subió a Jerusalén(CY). 14 (CZ)En el templo encontró a los que vendían bueyes, ovejas y palomas, y a los que cambiaban dinero allí sentados. 15 Y haciendo un látigo de cuerdas, echó a todos fuera del templo, con las ovejas y los bueyes; desparramó las monedas de los que cambiaban el dinero y volcó las mesas. 16 A los que vendían palomas les dijo(DA): «Quiten esto de aquí; no hagan de la casa de Mi Padre(DB) una casa de comercio».
17 Sus discípulos(DC) se acordaron de que estaba escrito: «El celo por Tu casa me consumirá(DD)».
18 Entonces los judíos(DE) le dijeron: «Ya que haces estas cosas, ¿qué señal(DF) nos muestras?». 19 Jesús les respondió: «Destruyan este templo[ad], y en tres días lo levantaré(DG)». 20 Entonces los judíos(DH) dijeron: «En cuarenta y seis años fue edificado este templo[ae](DI), ¿y Tú lo levantarás en tres días?».
21 Pero Él hablaba del templo[af] de Su cuerpo(DJ). 22 Por eso, cuando resucitó de los muertos, Sus discípulos(DK) se acordaron(DL) de que había dicho esto; y creyeron en la Escritura(DM) y en la palabra que Jesús había hablado.
Los primeros creyentes en Jerusalén
23 Cuando Jesús estaba en Jerusalén durante la fiesta de la Pascua(DN), muchos creyeron en Su nombre al ver las señales(DO) que hacía. 24 Pero Jesús, en cambio, no se confiaba en ellos, porque los conocía a todos(DP), 25 y[ag] no tenía necesidad de que nadie le diera testimonio del hombre, porque Él conocía lo que había en el interior del hombre(DQ).
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