Que nadie se alegre al ver que estoy viuda y que me han quitado a tantos hijos. Desierta estoy por los pecados de mis hijos, porque se apartaron de la ley de Dios.
Que nadie se alegre al verme sola y abandonada por todos. Me quedé sin habitantes porque ellos pecaron contra Dios y no obedecieron sus mandamientos. No permitieron que él les enseñara cómo vivir en este mundo.