Juan 1:19-36
Traducción en lenguaje actual
Juan el Bautista habla de Jesús
19-20 Los jefes de los judíos que vivían en Jerusalén enviaron a algunos sacerdotes, y a otros ayudantes del templo, para que le preguntaran a Juan quién era él. Juan les respondió claramente:
—Yo no soy el Mesías.
21 Y ellos volvieron a preguntarle:
—¿Eres Elías?
Juan les respondió:
—No; no soy Elías.
Pero los sacerdotes y sus acompañantes insistieron:
—¿Eres tú el profeta[a] que Dios iba a enviar?
—No —dijo Juan.
22 Finalmente, le dijeron:
—Tenemos que llevar una respuesta a los que nos enviaron. Dinos, ¿quién eres tú?
23 Juan les hizo recordar:
—Yo soy el que grita en el desierto: “Prepárenle el camino al Señor”.[b]
24-25 Entonces los mensajeros de los fariseos le dijeron a Juan:
—Si tú no eres el Mesías, ni Elías ni el profeta, ¿por qué bautizas?
26 Juan contestó:
—Yo bautizo con agua. Pero hay entre ustedes uno a quien todavía no conocen. 27 Aunque yo he llegado antes, él es más importante que yo, y ni siquiera merezco ser su esclavo.
28 Todo esto pasó en el pueblo de Betania, al otro lado del río Jordán, donde Juan bautizaba.
El Cordero de Dios
29 Al día siguiente, Juan vio que Jesús se acercaba. Entonces le dijo a toda la gente:
«¡Aquí viene el Cordero de Dios[c] que quita el pecado de la gente del mundo! Por medio de él, Dios les perdonará a ustedes todos sus pecados. 30 Yo me refería a él cuando dije: “Después de mí viene uno que es más importante que yo, porque existe desde antes de que yo naciera.” 31 Yo no sabía quién era, pero Dios me mandó a bautizar con agua para que todos puedan conocerlo.
32 »Yo vi cuando el Espíritu de Dios bajaba del cielo en forma de paloma y se colocaba sobre él. 33 No sabía yo quién era él, pero Dios me dijo: “Conocerás al que bautiza con el Espíritu Santo cuando veas que mi Espíritu baja y se coloca sobre él.” 34 Ahora lo he visto, y les aseguro que él es el Hijo de Dios.»
Los primeros discípulos de Jesús
35 Al día siguiente, Juan estaba en el mismo lugar con dos de sus discípulos. 36 Cuando vio que Jesús pasaba por allí, les dijo: «¡Miren, aquí viene el Cordero de Dios!»[d]
Read full chapterFootnotes
- Juan 1:21 El profeta: Muchos judíos sabían que Dios iba a enviar un profeta como Moisés, pero que sería más poderoso que él (véase Deuteronomio 18.15-18).
- Juan 1:23 Al citar Juan las palabras del profeta Isaías (40.3), estaba diciendo que él era esa voz.
- Juan 1:29 Cordero de Dios: Los judíos tenían que ofrecerle a Dios el sacrificio de un cordero, para que él les perdonara los pecados. Pero ahora Dios los perdonaría por medio de la muerte de Jesús. Por eso Jesús es llamado Cordero de Dios.
- Juan 1:36 Cordero de Dios: Véase nota en 1.29.
Copyright © 2000 by United Bible Societies