Josué 10:1-27
Nueva Biblia de las Américas
Derrota de los amorreos
10 Cuando Adonisedec, rey de Jerusalén, se enteró de que Josué había capturado a Hai y que la había destruido por completo[a](A) (como había hecho con Jericó y con su rey así había hecho con Hai y con su rey), y que los habitantes de Gabaón habían concertado la paz con Israel y estaban dentro de su tierra[b](B), 2 tuvo[c] gran temor(C), porque Gabaón era una gran ciudad, como una de las ciudades reales, y porque era más grande que Hai, y todos sus hombres eran valientes.
3 Por tanto, Adonisedec, rey de Jerusalén, envió mensaje a Hoham, rey de Hebrón, a Piream, rey de Jarmut, a Jafía, rey de Laquis y a Debir, rey de Eglón(D), diciéndoles: 4 «Suban a mí y ayúdenme, y ataquemos[d] a Gabaón, porque ha hecho paz con Josué y con los israelitas(E)».
5 Se reunieron, pues, los cinco reyes de los amorreos(F): el rey de Jerusalén, el rey de Hebrón, el rey de Jarmut, el rey de Laquis y el rey de Eglón, y subieron ellos con todos sus ejércitos, y acamparon junto a Gabaón y lucharon contra ella.
6 Entonces los hombres de Gabaón enviaron mensaje a Josué al campamento de Gilgal y le dijeron: «No abandone a[e] sus siervos; suba rápidamente a nosotros, sálvenos y ayúdenos, porque todos los reyes de los amorreos que habitan en los montes se han reunido contra nosotros». 7 Josué subió de Gilgal, él y toda la gente de guerra con él, y todos los valientes guerreros(G).
8 Y el Señor dijo a Josué: «No les tengas miedo, porque los he entregado en tus manos. Ninguno[f] de ellos te podrá resistir(H)». 9 Vino, pues, Josué sobre ellos de repente, habiendo marchado[g] toda la noche desde Gilgal. 10 Y el Señor los desconcertó delante de Israel, y los hirió con gran matanza en Gabaón(I). Luego los persiguió por el camino de la subida de Bet Horón y los hirió hasta Azeca y Maceda.
11 Mientras huían delante de Israel, cuando estaban en la bajada de Bet Horón, el Señor arrojó desde el cielo grandes piedras sobre ellos(J) hasta Azeca y murieron. Y fueron más los que murieron por las piedras del granizo que los que mataron a espada los israelitas.
12 Entonces Josué habló al Señor el día en que el Señor entregó a los amorreos delante de los israelitas, y dijo en presencia de Israel:
«Sol, detente en Gabaón,
Y tú luna, en el valle de Ajalón(K)».
13 Y el sol se detuvo, y la luna se paró(L),
Hasta que la nación se vengó de sus enemigos.
¿No está esto escrito en el libro de Jaser(M)? Y el sol se detuvo en medio del cielo y no se apresuró a ponerse(N) como por un día entero.
14 Ni antes ni después hubo día como aquel, cuando el Señor prestó atención a la voz de un hombre, porque el Señor peleó por Israel(O). 15 Entonces Josué, y todo Israel con él, volvió al campamento en Gilgal.
Muerte de los cinco reyes
16 Aquellos cinco reyes(P) habían huido y se habían escondido en la cueva de Maceda. 17 Y fue dado aviso a Josué: «Los cinco reyes han sido hallados escondidos en la cueva de Maceda». 18 Y Josué dijo: «Rueden piedras grandes hacia la entrada[h] de la cueva, y pongan junto a ella hombres que los vigilen, 19 pero ustedes no se queden ahí. Persigan a sus enemigos y atáquenlos[i] por la retaguardia. No les permitan entrar en sus ciudades, porque el Señor, Dios de ustedes, los ha entregado en sus manos».
20 Cuando Josué y los israelitas terminaron de herirlos con gran matanza, hasta que fueron destruidos, y los sobrevivientes que de ellos quedaron habían[j] entrado en las ciudades fortificadas(Q), 21 todo el pueblo volvió en paz al campamento y a Josué en Maceda. Nadie profirió palabra alguna[k] contra ninguno de los israelitas.
22 Entonces Josué dijo: «Abran la entrada[l] de la cueva y sáquenme de ella[m] a esos cinco reyes». 23 Así lo hicieron, y le trajeron[n] de la cueva a estos cinco reyes(R): el rey de Jerusalén, el rey de Hebrón, el rey de Jarmut, el rey de Laquis y el rey de Eglón.
24 Cuando llevaron[o] estos reyes a Josué, Josué llamó a todos los hombres de Israel, y dijo a los jefes de los hombres de guerra que habían ido con él: «Acérquense, pongan su pie sobre el cuello de estos reyes». Ellos se acercaron y pusieron los pies sobre sus cuellos(S). 25 Entonces Josué les dijo: «No teman ni se acobarden. Sean fuertes y valientes, porque así hará el Señor a todos los enemigos con los que ustedes luchen(T)».
26 Después Josué les dio muerte y los colgó de cinco árboles, y quedaron colgados de los árboles hasta la tarde(U). 27 A la hora de la puesta[p] del sol, Josué dio órdenes y los bajaron de los árboles, y los echaron en la cueva donde se habían escondido, y sobre la boca de la cueva pusieron grandes piedras(V) que permanecen hasta el día de hoy.
Read full chapterFootnotes
- Josué 10:1 O dedicado al anatema.
- Josué 10:1 Lit. entre ellos.
- Josué 10:2 Lit. tuvieron.
- Josué 10:4 Lit. e hiramos.
- Josué 10:6 Lit. No aflojes tu mano para con.
- Josué 10:8 Lit. ningún hombre.
- Josué 10:9 Lit. subido.
- Josué 10:18 Lit. boca.
- Josué 10:19 Lit. hiéranlos.
- Josué 10:20 Lit. y habían.
- Josué 10:21 Lit. afiló su lengua.
- Josué 10:22 Lit. boca.
- Josué 10:22 Lit. de la cueva.
- Josué 10:23 Lit. sacaron.
- Josué 10:24 Lit. sacaron.
- Josué 10:27 Lit. ida.
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