Hechos 13:4-43

La Biblia de las Américas

Pablo y Bernabé en Chipre

⁴ Ellos, pues, enviados por el Espíritu Santo^(A), descendieron a Seleucia y de allí se embarcaron para Chipre^(B). ⁵ Llegados a Salamina, proclamaban la palabra de Dios en las sinagogas^(C) de los judíos; y tenían también a Juan^(D) de ayudante. ⁶ Después de haber recorrido toda la isla hasta Pafos, encontraron a cierto mago^(E), un falso profeta^(F) judío llamado Barjesús, ⁷ que estaba con el procónsul^(G) Sergio Paulo, hombre inteligente. Este hizo venir a Bernabé y a Saulo, y deseaba oír la palabra de Dios. ⁸ Pero Elimas, el mago^(H) (pues así se traduce su nombre), se les oponía, tratando de desviar de la fe^(I) al procónsul^(J). ⁹ Entonces Saulo, llamado también Pablo, lleno del Espíritu Santo^(K), fijando la mirada en él, ¹⁰ dijo: Tú, hijo del diablo^(L), que estás lleno de todo engaño y fraude, enemigo de toda justicia, ¿no cesarás de torcer los caminos rectos del Señor^(M)? ¹¹ Ahora, he aquí, la mano del Señor está sobre ti^(N); te quedarás ciego y no verás el sol por algún tiempo. Al instante niebla y oscuridad cayeron sobre él, e iba buscando quien lo guiara de la mano. ¹² Entonces el procónsul^(O), cuando vio lo que había sucedido, creyó, maravillado de la doctrina del Señor^(P).

Pablo y Bernabé en Antioquía de Pisidia

¹³ Pablo y sus compañeros zarparon de Pafos^(Q), y llegaron a Perge^(R) de Panfilia^(S); pero Juan^(T), apartándose de ellos, regresó a Jerusalén, ¹⁴ mas ellos, saliendo de Perge, llegaron a Antioquía^(U) de Pisidia^(V); y en el día de reposo^(W) entraron a la sinagoga^(X) y se sentaron. ¹⁵ Después de la lectura de la ley^(Y) y los profetas^(Z), los oficiales de la sinagoga^(AA) les mandaron a decir: Hermanos^[a], si tenéis alguna palabra de exhortación para el pueblo, hablad.

Discurso de Pablo en Antioquía de Pisidia

¹⁶ Pablo se levantó, y haciendo señal con la mano^(AB), dijo:

Hombres de Israel, y vosotros que teméis a Dios^(AC), escuchad: ¹⁷ El Dios de este pueblo de Israel, escogió a nuestros padres y engrandeció^[b] al pueblo durante su estancia en la tierra de Egipto^(AD), y con brazo levantado los sacó de ella^(AE). ¹⁸ Y por un período como de cuarenta años^(AF) los soportó^[c] en el desierto^(AG). ¹⁹ Después de destruir siete naciones^(AH) en la tierra de Canaán^(AI), repartió sus tierras en herencia^(AJ); todo esto duró como cuatrocientos cincuenta años^(AK). ²⁰ Y después de esto, les dio jueces^(AL) hasta el profeta Samuel^(AM). ²¹ Entonces ellos pidieron un rey^(AN), y Dios les dio a Saúl, hijo de Cis, varón de la tribu de Benjamín^(AO), durante cuarenta años. ²² Después de quitarlo^(AP), les levantó por rey a David, del cual Dios también testificó y dijo: «He hallado a David, hijo de Isaí, un hombre conforme a mi corazón^(AQ), que hará toda mi voluntad^[d]». ²³ De la descendencia de este^(AR), conforme a la promesa, Dios ha dado^[e] a Israel un Salvador^(AS), Jesús^(AT), ²⁴ después de que Juan predicó, antes de su venida^[f], un bautismo de arrepentimiento^(AU) a todo el pueblo de Israel. ²⁵ Cuando Juan estaba a punto de terminar su carrera^(AV), decía: «¿Quién pensáis que soy yo? Yo no soy el Cristo; mas he aquí, viene tras mí uno de quien yo no soy digno de desatar las sandalias de sus pies^(AW)». ²⁶ Hermanos, hijos del linaje de Abraham, y los que entre vosotros teméis a Dios, a nosotros^[g] nos es enviada la palabra de esta salvación^(AX). ²⁷ Pues los que habitan en Jerusalén y sus gobernantes^(AY), sin reconocerle^(AZ) a Él ni las palabras^[h] de los profetas^(BA) que se leen todos los días de reposo^(BB), cumplieron estas escrituras, condenándole. ²⁸ Y aunque no hallaron causa para darle muerte, pidieron a Pilato que le hiciera matar^[i](BC). ²⁹ Y cuando habían cumplido todo lo que estaba escrito acerca de Él^(BD), le bajaron de la cruz^[j](BE) y le pusieron en un sepulcro^(BF). ³⁰ Pero Dios le levantó de entre los muertos^(BG); ³¹ y por muchos días se apareció a los que habían subido con Él de Galilea^(BH) a Jerusalén, los cuales ahora son sus testigos^(BI) ante el pueblo. ³² Y nosotros os anunciamos la buena nueva^[k](BJ) de que la promesa hecha a los padres^(BK), ³³ Dios la ha cumplido a nuestros hijos^[l] al resucitar a Jesús^(BL), como también está escrito en el salmo segundo: Hijo mío eres tú; yo te he engendrado hoy^(BM). ³⁴ Y en cuanto a que le resucitó de entre los muertos^(BN) para nunca más volver a corrupción, Dios ha hablado de esta manera: Os daré las santas y fieles misericordias^[m] prometidas a David^(BO). ³⁵ Por tanto dice también en otro salmo: No permitirás^[n] que tu Santo^[o] vea corrupción^(BP). ³⁶ Porque David, después de haber servido el propósito de Dios^(BQ) en su propia generación^[p], durmió^[q](BR), y fue sepultado con sus padres^(BS), y vio corrupción. ³⁷ Pero aquel a quien Dios resucitó^(BT) no vio corrupción. ³⁸ Por tanto, hermanos, sabed que por medio de Él^[r] os es anunciado el perdón de los pecados^(BU); ³⁹ y que de todas las cosas de que no pudisteis ser justificados^[s] por la ley de Moisés^[t], por medio de Él, todo aquel que cree es justificado^[u](BV). ⁴⁰ Tened, pues, cuidado de que no venga sobre vosotros aquello de que se habla en los profetas^(BW):

Pablo se dirige a los gentiles

⁴² Al salir Pablo y Bernabé^[w], la gente^[x] les rogaba que el siguiente día de reposo^(BY) les hablaran de estas cosas^[y]. ⁴³ Y terminada la reunión de la sinagoga, muchos de los judíos y de los prosélitos^[z](BZ) temerosos de Dios^(CA) siguieron a Pablo y a Bernabé, quienes, hablándoles, les instaban a perseverar en la gracia de Dios^(CB).