Add parallel Print Page Options

25 Entonces el Señor habló a Moisés en el monte Sinaí, diciendo: Habla a los hijos de Israel, y diles: «Cuando entréis a la tierra que yo os daré, la tierra guardará reposo para el Señor. Seis años sembrarás la tierra(A), seis años podarás tu viña y recogerás sus frutos, pero el séptimo año la tierra tendrá completo descanso(B), un reposo para el Señor; no sembrarás tu campo ni podarás tu viña. Lo que nazca espontáneamente después de tu cosecha no lo segarás, y las uvas de los sarmientos de tu viñedo no recogerás; la tierra tendrá un año de reposo. Y el fruto del reposo de la tierra os servirá de alimento(C): a ti, a tus siervos, a tus siervas, a tu jornalero y al extranjero, a los que residen contigo. También a tu ganado y a los animales que están en tu tierra, todas sus cosechas les servirán de alimento.

»Contarás también siete semanas de años para ti, siete veces siete años, para que tengas el tiempo de siete semanas de años, es decir, cuarenta y nueve años. Entonces tocarás fuertemente el cuerno de carnero el décimo día del séptimo mes; en el día de la expiación(D) tocaréis el cuerno por toda la tierra. 10 Así consagraréis el quincuagésimo año y proclamaréis libertad(E) en[a] la tierra para todos sus habitantes. Será de jubileo para vosotros, y[b] cada uno de vosotros volverá a su posesión(F), y[c] cada uno de vosotros volverá a su familia. 11 Tendréis el quincuagésimo año como año de jubileo: no sembraréis, ni segaréis lo que nazca espontáneamente, ni vendimiaréis sus viñas sin podar. 12 Porque es jubileo, os será santo. De lo que produzca el[d] campo, comeréis.

13 »En este año de jubileo cada uno de vosotros volverá a su propia posesión(G). 14 Asimismo, si vendéis algo a vuestro[e] prójimo, o compráis algo de la mano de vuestro[f] prójimo, no os hagáis mal uno a otro(H). 15 Conforme al número de años después del jubileo, comprarás de tu prójimo, y él te venderá conforme al número de años de cosecha. 16 Si son muchos los años[g], aumentarás su precio(I), y si son pocos los años, disminuirás su precio; porque es un número de cosechas lo que te está vendiendo. 17 Así que no os hagáis mal uno a otro(J), sino temed[h] a vuestro Dios; porque yo soy el Señor vuestro Dios.

18 »Cumpliréis, pues, mis estatutos y guardaréis mis leyes[i], para ejecutarlos, para que habitéis seguros en la tierra(K). 19 Entonces la tierra dará su fruto, comeréis hasta que os saciéis[j] y habitaréis en ella con seguridad. 20 Pero si decís: “¿Qué vamos a comer el séptimo año si[k] no sembramos ni recogemos nuestras cosechas(L)?”, 21 yo entonces os enviaré[l] mi bendición(M) en el sexto año, de modo que producirá fruto para tres años. 22 Cuando estéis sembrando en el octavo año, todavía podréis comer cosas de la cosecha anterior(N), comiendo de ellas hasta el noveno año cuando venga la[m] nueva cosecha.

23 »Además, la tierra no se venderá en forma permanente, pues la tierra es mía(O); porque vosotros sois solo forasteros y peregrinos para conmigo(P). 24 Así que a toda tierra en posesión vuestra, otorgaréis el derecho de ser redimida. 25 Si uno de tus hermanos llega a ser tan pobre que tiene que vender parte de su posesión, su pariente más cercano[n] vendrá y redimirá(Q) lo que su hermano haya vendido. 26 Y en caso de que un hombre no tenga redentor[o], pero consiga[p] los medios suficientes para su redención, 27 entonces computará los años(R) desde la[q] venta y devolverá el resto al hombre a quien había vendido la tierra[r], y así volverá a su posesión. 28 Pero si no ha hallado medios suficientes[s] para recobrarla por sí mismo, entonces lo que ha vendido permanecerá en manos del[t] comprador hasta el año de jubileo; pero en el jubileo saldrá de su poder, y el vendedor[u] volverá a su posesión(S).

29 »Si un hombre vende una casa de vivienda en una ciudad amurallada, su derecho a redimirla es válido hasta que se cumpla un año de su venta; su derecho de redención dura todo un año. 30 Pero si no se la redimen en el espacio de un año, la casa que está en la ciudad amurallada pasará para siempre a su comprador por todas sus generaciones; no saldrá de su poder en el jubileo. 31 Mas las casas de las aldeas que no tienen muro alrededor, serán consideradas como[v] campo abierto; tienen derechos de redención, y son recuperadas[w] en el jubileo. 32 En cuanto a las ciudades de los levitas(T), ellos[x] tienen un derecho permanente de redención para las casas de las ciudades que son propiedad suya. 33 Así que lo que pertenece a[y] los levitas se puede redimir, y una casa de su propiedad vendida en[z] la ciudad es recuperada[aa] en el jubileo, porque las casas de las ciudades de los levitas son propiedad suya entre los hijos de Israel. 34 Pero las tierras de pasto de sus ciudades(U) no se venderán porque son propiedad suya para siempre.

35 »En caso de que un hermano tuyo empobrezca y sus medios para contigo decaigan[ab], tú lo sustentarás como a un forastero o peregrino, para que viva contigo(V). 36 No tomes interés y usura de él(W), mas teme a tu Dios, para que tu hermano viva contigo. 37 No le darás tu dinero a interés, ni tus víveres a ganancia. 38 Yo soy el Señor vuestro Dios, que os saqué de la tierra de Egipto(X) para daros la tierra de Canaán y para ser vuestro Dios(Y).

39 »(Z)Y si un hermano tuyo llega a ser tan pobre para contigo que se vende a ti, no lo someterás a trabajo de esclavo. 40 Estará contigo como jornalero, como si fuera un peregrino; él servirá contigo hasta el año de jubileo(AA). 41 Entonces saldrá libre de ti, él y sus hijos con él, y volverá a su familia, para que pueda regresar a la propiedad de sus padres. 42 Porque ellos son mis siervos, los cuales saqué de la tierra de Egipto; no serán vendidos en venta de esclavos. 43 No te enseñorearás de él con severidad(AB), más bien, teme a tu Dios. 44 En cuanto a los esclavos y esclavas que puedes tener de las naciones paganas que os rodean, de ellos podréis adquirir esclavos y esclavas. 45 También podréis adquirirlos de los hijos de los extranjeros que residen con vosotros, y de sus familias que están con vosotros, que hayan sido engendradas en vuestra tierra; estos también pueden ser posesión vuestra. 46 Aun podréis dejarlos en herencia a vuestros hijos después de vosotros, como posesión; os podréis servir de ellos como esclavos para siempre. Pero en cuanto a vuestros hermanos, los hijos de Israel, no os enseñorearéis unos de otros con severidad(AC).

47 »Si aumentan los bienes[ac] del forastero o del peregrino que mora contigo, y si empobrece tu hermano que está con él, y se vende al forastero que mora contigo, o se vende a los descendientes de la familia de un forastero, 48 él tendrá derecho de redención después de ser vendido; uno de sus hermanos podrá redimirlo; 49 o su tío o el hijo de su tío podrán redimirlo; o un pariente cercano de su familia podrá redimirlo; o si prospera[ad], él mismo podrá redimirse(AD). 50 Entonces él, con su comprador, calculará desde el año en que se vendió a él hasta el año de jubileo, y el precio de su venta corresponderá al número de años. Los días que estará con él serán como los días de un jornalero. 51 Si aún le quedan muchos años, devolverá parte de su precio de compra en proporción a ellos(AE) para su propia redención; 52 y si quedan pocos años hasta el año de jubileo, así los calculará con él. En proporción a los años devolverá la cantidad de su redención. 53 Lo tratará[ae] como quien trabaja a jornal año por año; no se enseñoreará de él con severidad(AF) delante de sus ojos. 54 Aunque no sea redimido por estos medios[af], todavía saldrá libre en el año de jubileo(AG), él y sus hijos con él. 55 Pues los hijos de Israel son mis siervos; siervos míos son, a quienes saqué de la tierra de Egipto. Yo soy el Señor vuestro Dios.

Bendiciones de la obediencia

26 »No os haréis ídolos(AH), ni os levantaréis imagen tallada(AI) ni pilares sagrados(AJ), ni pondréis en vuestra tierra piedra grabada(AK) para inclinaros ante[ag] ella; porque yo soy el Señor vuestro Dios. Guardaréis mis días de reposo(AL), y tendréis en reverencia mi santuario; yo soy el Señor. (AM)Si andáis en mis estatutos y guardáis mis mandamientos para ponerlos por obra, yo os daré lluvias en su tiempo(AN), de manera que la tierra dará sus productos, y los árboles del campo darán su fruto. Ciertamente, vuestra trilla os durará hasta la vendimia, y la vendimia hasta el tiempo de la siembra. Comeréis, pues, vuestro pan hasta que os saciéis[ah](AO) y habitaréis seguros en vuestra tierra(AP). Daré también paz en la tierra(AQ), para que durmáis sin que nadie os atemorice(AR). Asimismo eliminaré bestias dañinas de vuestra[ai] tierra(AS), y no pasará espada por vuestra tierra(AT). Y vosotros perseguiréis a vuestros enemigos y caerán a espada delante de vosotros; cinco de vosotros perseguirán a cien(AU), y cien de vosotros perseguirán a diez mil, y vuestros enemigos caerán a espada delante de vosotros. Me volveré hacia vosotros y os haré fecundos y os multiplicaré(AV) y confirmaré mi pacto con vosotros(AW). 10 Y comeréis de las provisiones almacenadas y tendréis que sacar lo almacenado para guardar lo nuevo(AX). 11 Además, haré mi morada[aj] en medio de vosotros(AY), y mi alma no os aborrecerá. 12 Andaré entre vosotros y seré vuestro Dios(AZ), y vosotros seréis mi pueblo. 13 Yo soy el Señor vuestro Dios, que os saqué de la tierra de Egipto para que no fuerais esclavos(BA) de ellos; rompí las varas de vuestro yugo(BB) y os hice andar erguidos.

Resultados de la desobediencia

14 »(BC)Pero si no me obedecéis y no ponéis por obra todos estos mandamientos, 15 si despreciáis(BD) mis estatutos y si aborrece vuestra alma mis ordenanzas para no poner por obra todos mis mandamientos, quebrantando así mi pacto(BE), 16 yo, por mi parte, os haré esto: Pondré sobre vosotros terror súbito(BF), tisis y fiebre que consuman los ojos y hagan languidecer el alma(BG). En vano sembraréis vuestra semilla, pues vuestros enemigos la comerán(BH). 17 Fijaré mi rostro contra vosotros, para que seáis derrotados delante de vuestros enemigos; los que os aborrecen os dominarán(BI) y huiréis sin que nadie os persiga(BJ). 18 Y si aun con todas estas cosas no me obedecéis, entonces os castigaré siete veces más por vuestros pecados(BK). 19 También quebrantaré el orgullo de vuestro poderío(BL), y haré vuestros cielos como hierro y vuestra tierra como bronce. 20 Y vuestras fuerzas se consumirán en vano, porque vuestra tierra no dará su producto y los árboles de la tierra no darán su fruto(BM).

21 »Y si procedéis[ak] con hostilidad contra mí(BN) y no queréis obedecerme, aumentaré la plaga sobre vosotros siete veces conforme a vuestros pecados(BO). 22 Soltaré entre vosotros las fieras del campo que os privarán de vuestros hijos(BP), destruirán vuestro ganado y os reducirán en número de manera que vuestros caminos queden desiertos(BQ).

23 »Y si con estas cosas no os enmendáis ante mí, sino que procedéis con hostilidad contra mí(BR), 24 entonces yo procederé[al] con hostilidad contra vosotros(BS); y yo mismo os heriré siete veces por vuestros pecados(BT). 25 Y traeré sobre vosotros una espada que ejecutará venganza(BU) a causa del pacto; y cuando os reunáis en vuestras ciudades, enviaré pestilencia entre vosotros(BV), para que seáis entregados en manos del enemigo. 26 Cuando yo os quite el sustento[am] del pan(BW), diez mujeres cocerán vuestro pan en un horno, y os darán vuestro pan en cantidades medidas[an], de modo que comeréis y no os saciaréis(BX).

27 »Si a pesar de todo esto no me obedecéis, sino que procedéis con hostilidad contra mí, 28 entonces yo procederé con hostilidad airada contra vosotros(BY), y yo mismo os castigaré siete veces por vuestros pecados. 29 Comeréis la carne de vuestros hijos(BZ), y la carne de vuestras hijas comeréis. 30 Y destruiré vuestros lugares altos(CA), derribaré vuestros altares de incienso[ao](CB) y amontonaré vuestros cadáveres sobre los cadáveres de vuestros ídolos, pues mi alma os aborrecerá. 31 También dejaré en ruinas vuestras ciudades(CC), desolaré vuestros santuarios(CD) y no oleré vuestros suaves aromas(CE). 32 Asolaré la tierra(CF) de tal modo que vuestros enemigos que se establezcan[ap] en ella queden pasmados(CG). 33 A vosotros, sin embargo, os esparciré entre las naciones(CH) y desenvainaré la espada en pos de vosotros, y vuestra tierra será asolada y vuestras ciudades quedarán en ruinas.

34 »Entonces la tierra gozará[aq] de sus días de reposo(CI) durante todos los días de su desolación, mientras que habitéis en la tierra de vuestros enemigos; entonces descansará la tierra y gozará[ar] de sus días de reposo. 35 Durante todos los días de su desolación la tierra guardará el descanso que no guardó en vuestros días de reposo mientras habitabais en ella. 36 En cuanto a los que queden de vosotros, infundiré cobardía[as] en sus corazones en la tierra de sus enemigos; y el sonido de una hoja que se mueva los ahuyentará, y aun cuando nadie los persiga, huirán como quien huye de la espada(CJ), y caerán. 37 Tropezarán unos con otros como si huyeran de la espada(CK) aunque nadie los persiga; no tendréis fuerza para hacer frente a vuestros enemigos. 38 Y pereceréis entre las naciones(CL) y os devorará la tierra de vuestros enemigos. 39 Así que los que sobrevivan de vosotros se pudrirán a causa de su iniquidad(CM) en la tierra de vuestros enemigos; también a causa de las iniquidades de sus antepasados se pudrirán juntamente con ellos.

40 »Si confiesan su iniquidad y la iniquidad de sus antepasados(CN), por las[at] infidelidades que cometieron contra mí, y también porque procedieron[au] con hostilidad contra mí 41 (yo también procedía[av] con hostilidad contra ellos para llevarlos a la tierra de sus enemigos), o si su corazón incircunciso(CO) se humilla, y reconocen sus iniquidades(CP), 42 entonces yo me acordaré de mi pacto con Jacob(CQ), me acordaré también de mi pacto con Isaac(CR) y de mi pacto con Abraham(CS), y me acordaré de la tierra. 43 Porque la tierra será abandonada por ellos, y gozará[aw] de sus días de reposo mientras quede desolada con su ausencia(CT). Entretanto, ellos pagarán[ax] su iniquidad, porque[ay] despreciaron mis ordenanzas y su alma aborreció(CU) mis estatutos. 44 Sin embargo, a pesar de esto, cuando estén en la tierra de sus enemigos no los desecharé ni los aborreceré(CV) tanto como para destruirlos(CW), quebrantando mi pacto con ellos(CX), porque yo soy el Señor su Dios, 45 sino que por ellos me acordaré del pacto con sus antepasados, que yo saqué de la tierra de Egipto(CY) a la vista de las naciones, para ser su Dios(CZ). Yo soy el Señor».

46 Estos son los estatutos, ordenanzas y leyes que el Señor estableció entre Él y los hijos de Israel por medio de[az] Moisés en el monte Sinaí(DA).

Leyes sobre votos personales

27 El Señor habló a Moisés, diciendo: Habla a los hijos de Israel y diles: «Cuando un hombre haga un voto difícil de cumplir, él será evaluado según tu valuación de personas pertenecientes al Señor(DB). Si tu valuación es de varón de veinte hasta sesenta años, entonces tu valuación será de cincuenta siclos[ba] de plata, según el siclo del santuario(DC). O si es de una mujer, tu valuación será de treinta siclos. Si es una persona de cinco hasta veinte años, entonces tu valuación será de veinte siclos para un varón y de diez siclos para una mujer. Pero si son de un mes hasta cinco años, entonces tu valuación será de cinco siclos de plata para el varón(DD), y para la mujer tu valuación será de tres siclos de plata. Y si son de sesenta años o más, si es varón, tu valuación será de quince siclos, y para la mujer, de diez siclos. Pero si es más pobre(DE) que tu valuación, entonces será llevado delante del sacerdote, y este[bb] lo valuará; según los recursos[bc] del que hizo el voto, el sacerdote lo valuará. Y si es un animal de los que[bd] se pueden presentar como ofrenda al Señor, cualquiera de los tales que uno dé al Señor, será sagrado. 10 No lo reemplazará ni lo cambiará, el bueno por el malo, o el malo por el bueno; pero si cambia un animal por otro animal, entonces ambos, el animal[be] y su sustituto serán sagrados(DF). 11 Sin embargo, si es algún animal inmundo de la clase que no se puede presentar[bf] como ofrenda al Señor, entonces pondrá el animal delante del sacerdote; 12 y el sacerdote lo valuará como bueno o como malo[bg]; como tú, el sacerdote, lo valúes, así será. 13 Pero si alguna vez él lo quiere redimir, él añadirá la quinta parte a tu valuación.

14 »Si un hombre consagra su casa como cosa sagrada al Señor, el sacerdote la valuará como buena o como mala[bh]; como el sacerdote la valúe, así será. 15 Pero si el que la consagra quisiera redimir su casa, añadirá a tu valuación la quinta parte del valor de ella; y así será suya.

16 »También, si un hombre consagra al Señor parte de las tierras de su propiedad, entonces tu valuación será en proporción a la semilla[bi] que se necesite para ella: cada homer[bj] de semilla de cebada a cincuenta siclos de plata. 17 Si consagra su campo durante el año de jubileo, conforme a tu valuación quedará. 18 Pero si consagra su campo después del jubileo, entonces el sacerdote le calculará el precio en proporción[bk] a los años que quedan hasta el año de jubileo, y será rebajado de tu valuación. 19 Y si el que lo consagra quiere redimir el campo, le añadirá una quinta parte al precio de tu valuación para que pase a su posesión[bl]. 20 Pero si no quiere redimir el campo, y se[bm] vende el campo a otro, ya no podrá redimirlo; 21 y cuando quede libre[bn] en el jubileo, el campo será consagrado al Señor, como campo dedicado; será para el sacerdote como posesión[bo] suya(DG). 22 Y si consagra al Señor un campo que ha comprado, que no es parte del campo de su propiedad[bp], 23 entonces el sacerdote le calculará la cantidad de tu valuación hasta el año de jubileo; y en ese día dará tu valuación como cosa consagrada al Señor. 24 En el año de jubileo el campo volverá a aquel de quien lo compró, a quien pertenece la posesión de la tierra. 25 Toda valuación que hagas[bq] será conforme al siclo del santuario(DH). Veinte geras son[br] un siclo.

26 »Sin embargo, el primogénito de los animales(DI), que por su primogenitura pertenece al Señor, nadie puede consagrarlo; ya sea buey u oveja, es del Señor. 27 Pero si está entre los animales inmundos, entonces lo redimirá conforme a tu valuación, y le añadirá una quinta parte al valor fijado; pero si no es redimido, será vendido conforme a tu valuación.

28 »Sin embargo, cualquier cosa dedicada que alguno separe[bs] para el Señor de lo que posee, sea hombre o animal, o campos de su propiedad, no se venderá ni redimirá. Toda cosa dedicada es santísima al Señor(DJ). 29 Ninguna persona que haya sido dedicada como anatema será redimida; ciertamente se le dará muerte.

30 »Así pues, todo el diezmo de la tierra, de la semilla de la tierra o del fruto del árbol, es del Señor(DK); es cosa consagrada al Señor. 31 Y si un hombre quiere redimir parte de su diezmo, le añadirá la quinta parte. 32 Todo diezmo del ganado o del rebaño, o sea, de todo lo que pasa debajo del cayado(DL), la décima cabeza será cosa consagrada al Señor. 33 No debe considerar si es bueno o malo(DM), tampoco lo cambiará; si lo cambia, tanto el animal como su sustituto serán sagrados. No podrán ser redimidos».

34 Estos son los mandamientos que el Señor ordenó a Moisés para los hijos de Israel en el monte Sinaí(DN).

Footnotes

  1. Levítico 25:10 I.e., devolución de
  2. Levítico 25:10 O, cuando
  3. Levítico 25:10 O, cuando
  4. Levítico 25:12 Lit., De su producto del
  5. Levítico 25:14 Lit., tu
  6. Levítico 25:14 Lit., tu
  7. Levítico 25:16 Lit., la multitud de años
  8. Levítico 25:17 O, reverenciad
  9. Levítico 25:18 O, juicios
  10. Levítico 25:19 Lit., hasta la saciedad
  11. Levítico 25:20 O, he aquí
  12. Levítico 25:21 U, ordenaré
  13. Levítico 25:22 Lit., su
  14. Levítico 25:25 O, redentor
  15. Levítico 25:26 O, pariente
  16. Levítico 25:26 Lit., su mano alcance
  17. Levítico 25:27 Lit., su
  18. Levítico 25:27 Lit., se la vendió
  19. Levítico 25:28 Lit., si su mano no ha hallado suficiente
  20. Levítico 25:28 Lit., de su
  21. Levítico 25:28 Lit., él
  22. Levítico 25:31 Lit., conforme a
  23. Levítico 25:31 Lit., salen
  24. Levítico 25:32 Lit., los levitas
  25. Levítico 25:33 Lit., es de parte de
  26. Levítico 25:33 Lit., y
  27. Levítico 25:33 Lit., sale de su poder
  28. Levítico 25:35 Lit., su mano...decaiga
  29. Levítico 25:47 Lit., Si aumenta la mano
  30. Levítico 25:49 Lit., si su mano ha alcanzado
  31. Levítico 25:53 Lit., Será con él
  32. Levítico 25:54 O, estos años
  33. Levítico 26:1 Lit., sobre
  34. Levítico 26:5 Lit., hasta la saciedad
  35. Levítico 26:6 Lit., la
  36. Levítico 26:11 O, tabernáculo
  37. Levítico 26:21 Lit., andáis, y así en los vers. 23 y 27
  38. Levítico 26:24 Lit., andaré, y así en el vers. 28
  39. Levítico 26:26 O, báculo
  40. Levítico 26:26 Lit., por peso
  41. Levítico 26:30 O, pilares del sol
  42. Levítico 26:32 Lit., habiten
  43. Levítico 26:34 Lit., se satisfará
  44. Levítico 26:34 Lit., se satisfará
  45. Levítico 26:36 O, flaqueza
  46. Levítico 26:40 Lit., sus
  47. Levítico 26:40 Lit., anduvieron
  48. Levítico 26:41 Lit., andaba
  49. Levítico 26:43 Lit., se satisfará
  50. Levítico 26:43 Lit., satisfarán
  51. Levítico 26:43 Lit., porque y por causa de que
  52. Levítico 26:46 Lit., por la mano de
  53. Levítico 27:3 Un siclo equivale aprox. a 11.4 gramos
  54. Levítico 27:8 Lit., el sacerdote
  55. Levítico 27:8 Lit., lo que la mano alcance
  56. Levítico 27:9 Lit., ellos
  57. Levítico 27:10 Lit., él
  58. Levítico 27:11 Lit., que ellos no presentan
  59. Levítico 27:12 Lit., entre bueno o malo
  60. Levítico 27:14 Lit., entre buena o mala
  61. Levítico 27:16 Lit., conforme a su semilla
  62. Levítico 27:16 Un homer equivale aprox. a 220 litros
  63. Levítico 27:18 Lit., conforme
  64. Levítico 27:19 Lit., a él
  65. Levítico 27:20 Lit., y si él
  66. Levítico 27:21 Lit., salga
  67. Levítico 27:21 O, propiedad
  68. Levítico 27:22 Lit., posesión
  69. Levítico 27:25 Lit., tuya
  70. Levítico 27:25 Lit., serán
  71. Levítico 27:28 Lit., dedique

El año de reposo y el año de liberación

25 El Señor se dirigió a Moisés en el monte Sinaí, y le dijo:

«Di a los israelitas lo siguiente: Cuando ustedes hayan entrado en la tierra que les voy a dar, la tierra deberá tener reposo en honor del Señor. Podrán sembrar sus campos durante seis años. También durante seis años podrán podar sus viñedos y recoger sus frutos, pero el séptimo año será de completo reposo de la tierra en honor del Señor; no siembren ese año sus campos ni poden sus viñedos. Tampoco corten el trigo que nazca por sí mismo después de la última cosecha, ni recojan las uvas de su viñedo no podado; la tierra debe tener reposo completo. Lo que la tierra produzca por sí misma durante su reposo, alcanzará para que coman ustedes, sus siervos y sus siervas, y los trabajadores y extranjeros que vivan con ustedes, y sus ganados y los animales feroces del país. Todo lo que la tierra produzca, les servirá de alimento.

»Deben contar siete semanas de años, es decir, siete años multiplicados por siete, lo cual dará un total de cuarenta y nueve años, y el día diez del mes séptimo, que es el Día del perdón, harán sonar el cuerno de carnero en todo el país. 10 El año cincuenta lo declararán ustedes año santo: será un año de liberación, y en él anunciarán libertad para todos los habitantes del país. Todo hombre volverá al seno de su familia y a la posesión de sus tierras. 11 El año cincuenta será para ustedes año de liberación, y en él no deberán sembrar, ni cortar el trigo que nazca por sí mismo, ni podar los viñedos ni recoger sus uvas, 12 porque es un año santo y de liberación para ustedes. Comerán sólo lo que la tierra produzca por sí misma.

13 »En este año de liberación todos ustedes volverán a tomar posesión de sus tierras. 14 Si alguien vende o compra a otra persona algún terreno, no trate de aprovecharse de ella; 15 el que compra debe pagar según el tiempo transcurrido desde el año de liberación, y el que vende debe cobrar según los años de cosecha que aún falten: 16 cuantos más años de cosecha falten, mayor será el precio; si quedan pocos años, el precio será menor, pues lo que se vende es el número de cosechas.

17 »No abuse nadie de nadie. Muestren reverencia por su Dios, pues yo soy el Señor su Dios. 18 Cumplan mis leyes, pongan en práctica mis decretos. Cúmplanlos y vivirán tranquilos en el país; 19 la tierra dará frutos, y ustedes vivirán tranquilamente en ella y comerán de sus frutos hasta quedar satisfechos.

20 »Tal vez se pregunten ustedes: “¿Y qué vamos a comer durante el séptimo año, si no podemos sembrar ni recoger la cosecha?” 21 Pues bien, yo les enviaré mi bendición durante el sexto año, y la cosecha será suficiente para tres años; 22 así comerán del grano almacenado mientras siembran de nuevo en el año octavo, y aun hasta el año noveno podrán comer del grano almacenado, mientras llega la cosecha.

23 »La tierra no debe venderse a perpetuidad: la tierra es mía, y ustedes sólo están de paso por ella como huéspedes míos. 24 Por lo tanto, para cualquier terreno que ustedes tengan en propiedad, deben conceder a los dueños anteriores el derecho de volver a comprarlo.

25 »Si uno de tus compatriotas se queda en la ruina y te vende alguno de sus terrenos, su pariente más cercano podrá venir y rescatar lo que su pariente había vendido.

26 »En el caso de alguien que no tenga un pariente que pueda rescatar su propiedad, pero que logre reunir lo suficiente para rescatarla él mismo, 27 calculará el tiempo transcurrido desde que la vendió, devolverá al que la compró la cantidad de dinero que resulte a su favor, y él volverá a tomar posesión de su propiedad. 28 Pero si no logra reunir lo suficiente para rescatar la propiedad, ésta se quedará en poder del comprador hasta el año de liberación, durante el cual será liberada la propiedad, y el que la vendió volverá a tomar posesión de ella.

29 »Si alguien vende una vivienda en una ciudad con murallas, tendrá derecho a volver a comprarla durante un año completo a partir de la fecha de venta. 30 Pero en caso de que la vivienda no sea rescatada en el término de un año, se quedará para siempre en poder del que la compró y de sus descendientes. No podrá ser liberada en el año de liberación. 31 En cambio, las casas de pueblos sin murallas serán consideradas igual que los campos: podrán ser rescatadas, y serán liberadas en el año de liberación.

32 »Los levitas tendrán siempre el derecho de volver a comprar las casas que estén dentro de las ciudades de ellos. 33 Si el que rescata es un levita, deberá abandonar la casa en el año de liberación e irse a la ciudad donde tiene su propiedad, porque la única propiedad de los levitas entre los israelitas es la casa que tienen en su ciudad. 34 Las tierras de pastoreo pertenecientes a las ciudades de los levitas, no podrán ser vendidas, porque son su propiedad permanente.

35 »Si alguno de tus compatriotas se queda en la ruina y recurre a ti, debes ayudarlo como a un extranjero de paso, y lo acomodarás en tu casa. 36 No le quites nada ni le cargues intereses sobre los préstamos que le hagas; al contrario, muestra temor por tu Dios y acomoda a tu compatriota en tu casa. 37 No le cargues interés al dinero que le prestes, ni aumentes el precio de los alimentos que le des. 38 Yo soy el Señor, el Dios de ustedes, que los sacó de Egipto para darles la tierra de Canaán y para ser su Dios.

39 »Si uno de tus compatriotas se queda en la ruina estando contigo, y se vende a ti, no lo hagas trabajar como esclavo; 40 trátalo como a un trabajador o como a un huésped. Trabajará para ti hasta el año de liberación, 41 después del cual podrá abandonar tu casa junto con sus hijos, para volver otra vez a su clan y a sus propiedades familiares; 42 pues ellos son mis siervos; yo los saqué de Egipto, y no deben ser vendidos como esclavos. 43 No los trates con crueldad; al contrario, muestra temor de tu Dios.

44 »Si quieres tener esclavos o esclavas, cómpralos de las otras naciones que te rodean. 45 También puedes comprar a la gente extranjera que vive entre ustedes, y a los hijos que les nazcan mientras estén en el país de ustedes; a ellos pueden comprarlos en propiedad 46 y dejarlos como herencia a sus hijos cuando ustedes mueran; siempre podrán servirse de ellos. Pero ninguno de ustedes, los israelitas, debe dominar ni tratar con crueldad a sus hermanos de raza.

47 »Si un extranjero que vive en tu tierra se hace rico, y en cambio uno de tus compatriotas, vecino del extranjero, se queda en la ruina y se vende a ese extranjero o a algún otro extranjero, 48 tendrá derecho a que se compre su libertad aun después de haberse vendido. Podrá ser rescatado por uno de sus hermanos, 49 un tío, un primo o cualquier pariente cercano; también podrá rescatarse él mismo, si tiene medios para hacerlo, 50 calculando con el que lo compró desde el año en que se vendió hasta el año de liberación: el precio de venta deberá corresponder al número de años, y el tiempo que haya trabajado se calculará según la paga que se da a los trabajadores. 51 Si aún quedan muchos años por delante, en proporción con ellos dará por su rescate parte del dinero que recibió por venderse; 52 pero si falta poco tiempo para el año de liberación, dará por su rescate la cantidad correspondiente a los años que falten. 53 Se le deberá tratar como a un trabajador contratado por año; no permitas que se le trate con crueldad.

54 »Si acaso no es rescatado en este tiempo, quedará en libertad en el año de liberación, junto con sus hijos, 55 pues los israelitas son mis siervos, mis propios siervos; yo los saqué de Egipto. Yo soy el Señor su Dios.

Bendiciones a los obedientes(A)

26 »No se hagan ídolos ni imágenes; no levanten en su país piedras sagradas ni piedras grabadas; no se inclinen ante ellas, porque yo soy el Señor su Dios. Respeten mis sábados; tengan reverencia por mi santuario: yo soy el Señor.

»Si siguen mis leyes, y cumplen mis mandamientos y los practican, yo les enviaré la lluvia a su tiempo, y la tierra y los árboles del campo darán su fruto; tendrán trigo hasta la cosecha de las uvas, y uvas hasta el tiempo de la siembra; comerán pan hasta quedar satisfechos, y gozarán de tranquilidad en el país. Les daré bienestar en el país, y dormirán sin sobresaltos, pues yo libraré al país de animales feroces y de guerras. Ustedes harán huir a sus enemigos, y ellos caerán a filo de espada ante ustedes; cinco de ustedes harán huir a cien, y cien de ustedes harán huir a diez mil; sus enemigos caerán ante ustedes a filo de espada. Los miraré a ustedes con buenos ojos, y los haré crecer en número, y mantendré con ustedes mi alianza. 10 Comerán del trigo almacenado en años anteriores, y hasta tendrán que desalojarlo para almacenar el trigo nuevo.

11 »Yo viviré entre ustedes, y no los rechazaré; 12 constantemente andaré entre ustedes, y seré su Dios, y ustedes serán mi pueblo. 13 Yo soy el Señor su Dios, que los sacó de Egipto para que no siguieran siendo esclavos de ellos; yo rompí el yugo que pesaba sobre ustedes, y los hice andar con la frente en alto.

Advertencias a los desobedientes(B)

14 »Pero si ustedes no me obedecen ni ponen en práctica todos estos mandamientos, 15 sino que rechazan y menosprecian mis leyes y decretos y no cumplen con ninguno de mis mandamientos, faltando así a mi alianza, 16 yo también haré lo siguiente con ustedes: les enviaré mi terror, epidemia mortal, fiebre, enfermedades de los ojos y decaimiento del cuerpo; de nada les servirá sembrar, porque sus enemigos se comerán la cosecha. 17 Yo me pondré en contra de ustedes, y serán derrotados por sus enemigos; serán dominados por aquellos que los odian, y tendrán que huir aunque nadie los persiga.

18 »Si a pesar de esto no me obedecen, los volveré a castigar siete veces por sus pecados. 19 Haré pedazos su necio orgullo; haré que el cielo les niegue su lluvia y la tierra sus frutos. 20 En vano gastarán sus fuerzas, porque la tierra no les producirá nada, ni los árboles del campo les darán frutos.

21 »Si siguen oponiéndose a mí y negándose a obedecerme, yo volveré a castigarlos siete veces más, conforme a sus pecados. 22 Lanzaré sobre ustedes bestias salvajes que los dejarán sin hijos, que despedazarán sus ganados y que reducirán el número de ustedes hasta que no haya quien transite por sus caminos.

23 »Si a pesar de todo esto no se corrigen, sino que siguen oponiéndose a mí, 24 yo también me opondré a ustedes y los castigaré aún siete veces más por sus pecados. 25 Haré venir sobre ustedes una espada que vengue la alianza; ustedes correrán a refugiarse en sus ciudades, pero yo les enviaré enfermedades, y ustedes caerán en poder del enemigo.

26 »Cuando yo destruya su provisión de alimentos, diez mujeres cocerán en un solo horno el pan de ustedes, y lo racionarán tanto que ustedes comerán y no quedarán satisfechos.

27 »Si a pesar de esto no me obedecen, sino que siguen oponiéndose a mí, 28 yo también me opondré a ustedes, y con enojo los castigaré aún otras siete veces más por sus pecados. 29 Entonces se comerán ustedes a sus propios hijos e hijas. 30 Yo destruiré sus santuarios paganos y partiré en dos sus altares de incienso; amontonaré los cuerpos sin vida de ustedes sobre los cuerpos sin vida de sus ídolos, y les mostraré mi desprecio; 31 dejaré en ruinas sus ciudades y destruidos sus santuarios, y no me deleitaré más en el aroma de sus perfumes.

32 »Destruiré el país, y los enemigos de ustedes que vengan a vivir en él se quedarán asombrados. 33 A ustedes los esparciré entre las naciones, y con la espada desnuda los perseguiré; su país se convertirá en un desierto y sus ciudades en espantosas ruinas. 34 Entonces la tierra disfrutará de tranquilidad todo el tiempo que permanezca desolada y que ustedes estén en el país de sus enemigos; así descansará y se desquitará de lo que antes no descansó. 35 Todo el tiempo que permanezca desolada, la tierra disfrutará de los días de reposo que no tuvo mientras ustedes habitaron en ella.

36 »A aquellos de ustedes que queden con vida en terreno enemigo, les haré sentir tanto miedo que huirán con el simple ruido de una hoja al caer; huirán como si los persiguieran con una espada, y caerán sin que nadie los persiga; 37 tropezarán unos contra otros como si huyeran de la guerra, aunque nadie los persiga; ¡ninguno de ustedes podrá hacer frente a sus enemigos! 38 Serán destruidos entre las naciones, y el país de sus enemigos acabará con ustedes; 39 y los que queden con vida en terreno enemigo, morirán por culpa de su maldad; ¡morirán junto con sus padres, por la maldad de ellos!

40 »Aunque ustedes reconozcan su maldad y la maldad de sus padres, lo mismo que su infidelidad y su oposición a mí, 41 yo también me opondré a ustedes y los llevaré al país de sus enemigos; allí su mente pagana quedará humillada, y pagarán por su pecado. 42 Entonces yo me acordaré de la alianza que hice con Jacob, con Isaac y con Abraham, y también me acordaré de la tierra, 43 la cual quedará libre de ustedes y disfrutará de sus días de reposo mientras ustedes no la habiten; y pagarán ustedes por su maldad, porque despreciaron mis decretos y rechazaron mis leyes.

44 »A pesar de esto, y aunque ustedes estén en un país enemigo, no los despreciaré ni los rechazaré; no los destruiré ni faltaré a la alianza que hice con sus antepasados, porque yo soy el Señor su Dios. 45 Por el contrario, me acordaré de la alianza que hice con ellos cuando los saqué de Egipto en presencia de las naciones para ser su Dios. Yo soy el Señor.»

46 Éstas son las leyes, decretos y enseñanzas que por medio de Moisés estableció el Señor en el monte Sinaí, entre él y los israelitas.

Cosas consagradas a Dios

27 El Señor se dirigió a Moisés y le dijo:

«Di a los israelitas lo siguiente: Cuando alguien quiera pagar una promesa al Señor conforme al valor correspondiente de una persona, a un varón de veinte a sesenta años le fijarás una contribución de cincuenta monedas de plata, según la medida oficial del santuario; en el caso de una mujer, la contribución será de treinta monedas. Para las personas de cinco a veinte años, la contribución será de veinte monedas si es hombre, y de diez monedas si es mujer. Para los niños de un mes a cinco años, la contribución será de cinco monedas de plata, y de tres para las niñas. Para las personas mayores de sesenta años, la contribución será de quince monedas para los hombres, y de diez monedas para las mujeres. Y si la persona es demasiado pobre para pagar la contribución establecida, se llevará el caso al sacerdote para que este fije una nueva contribución, de acuerdo con las posibilidades del que hizo la promesa.

»En el caso de los animales que se pueden ofrecer al Señor, todo animal que se entregue al Señor quedará consagrado, 10 y no podrá ser cambiado por otro animal, ya sea mejor o peor. En caso de que haya cambio, tanto el animal ofrecido como el animal dado a cambio quedarán consagrados.

11 »En el caso de un animal impuro, que no puede ser ofrecido al Señor, se llevará el animal al sacerdote 12 para que éste fije la contribución correspondiente, según la calidad del animal. La contribución fijada por el sacerdote deberá ser aceptada, 13 y si se quiere recuperar el animal, se deberá dar una quinta parte más de la contribución establecida.

14 »Si alguien consagra su casa al Señor, el sacerdote establecerá su valor según la calidad de la casa. El cálculo del sacerdote deberá ser aceptado. 15 Pero en caso de que el que consagró la casa quiera rescatarla, deberá dar una quinta parte más del valor en que había sido calculada, y la casa volverá a ser suya.

16 »Si alguien consagra al Señor una parte de su terreno, el valor del terreno se calculará según lo que pueda producir, a razón de cincuenta monedas de plata por cada doscientos veinte litros de cebada. 17 Si consagra el terreno a partir del año de liberación, quedará en pie el valor establecido; 18 pero si lo consagra después del año de liberación, el sacerdote hará el cálculo de la plata que se debe dar, descontando del valor calculado la cantidad que corresponda a los años que restan hasta el año de liberación.

19 »Si el que consagró el terreno quiere recuperarlo, deberá dar una quinta parte más sobre el valor calculado, y el terreno seguirá siendo suyo; 20 pero si no lo recupera, y el terreno se vende a otra persona, ya no podrá volver a recuperarlo. 21 Cuando el terreno quede libre en el año de liberación, será dedicado para uso exclusivo del Señor, y el sacerdote tomará posesión de él.

22 »Si alguien consagra al Señor un terreno comprado, que no es su herencia de familia, 23 el sacerdote calculará con esa persona el precio del terreno hasta el año de liberación, y esa persona pagará ese mismo día la cantidad estimada como valor del terreno, y la consagrará al Señor. 24 En el año de liberación, el terreno volverá a poder del que lo vendió, es decir, a poder del propietario real del terreno.

25 »Todos tus cálculos deben tener como base el siclo de veinte geras, que es el peso oficial del santuario.

26 »En cuanto a las primeras crías del ganado, que son del Señor por ser las primeras, nadie debe consagrarlas. Ya sea un ternerito o un corderito, es del Señor. 27 Si se trata de un animal impuro, podrá ser rescatado según el precio que se le fije, más una quinta parte de ese precio. Pero si no es rescatado, podrá ser vendido en el precio fijado.

28 »Si alguien consagra al Señor parte de sus pertenencias, ya sean personas, animales o terrenos heredados de su familia, nada de lo consagrado podrá ser vendido ni recuperado; todo lo consagrado será una cosa santísima dedicada al Señor. 29 Y tampoco podrá rescatarse a ninguna persona que haya sido destinada a la destrucción: tendrá que morir.

30 »La décima parte de los productos de la tierra, tanto de semillas como de árboles frutales, pertenece al Señor y está consagrada a él. 31 Si alguien quiere recuperar algo de esa décima parte, tendrá que pagar lo que valga, más una quinta parte.

32 »Uno de cada diez animales del ganado o del rebaño será consagrado al Señor como décima parte, 33 sin escoger los mejores ni los peores, ni cambiar uno por otro. En caso de hacer un cambio, tanto el primer animal como el animal dado a cambio quedarán consagrados y, por lo tanto, no podrán ser recuperados.»

34 Éstos son los mandamientos que el Señor dio a Moisés para los israelitas, en el monte Sinaí.

El año sabático

25 En el monte Sinaí el Señor ordenó a Moisés que dijera a los israelitas: «Cuando ustedes hayan entrado en la tierra que les voy a dar, la tierra misma deberá observar un año de reposo[a] en honor al Señor. Durante seis años sembrarás tus campos, podarás tus viñas y cosecharás sus productos; pero llegado el séptimo año la tierra gozará de un año de reposo en honor al Señor. No sembrarás tus campos ni podarás tus viñas; no segarás lo que haya brotado por sí mismo ni vendimiarás las uvas de tus viñas no cultivadas. La tierra gozará de un año de completo reposo. Sin embargo, de todo lo que la tierra produzca durante ese año sabático, podrán comer no solo tú, sino también tu siervo y tu sierva, el jornalero y el residente temporal entre ustedes. También podrán alimentarse tu ganado y los animales que haya en el país. Todo lo que la tierra produzca ese año será solo para el consumo diario.

El año del jubileo

»Siete veces contarás siete años sabáticos, de modo que los siete años sabáticos sumen cuarenta y nueve años. El día diez del mes séptimo, es decir, el día del Perdón, harás resonar la trompeta por todo el país. 10 El año cincuenta será declarado santo, y se proclamará en el país la liberación de todos sus habitantes. Será para ustedes un jubileo y cada uno volverá a su heredad familiar y a su propio clan. 11 El año cincuenta será para ustedes un jubileo: ese año no sembrarán ni cosecharán lo que haya brotado por sí mismo, ni tampoco vendimiarán las viñas no cultivadas. 12 Ese año es jubileo y será santo para ustedes. Comerán solamente lo que los campos produzcan por sí mismos.

13 »En el año de jubileo cada uno volverá a su heredad familiar.

14 »Si entre ustedes se realizan transacciones de compraventa, no se exploten los unos a los otros. 15 Tú comprarás de tu prójimo a un precio proporcional al número de años que falten para el próximo jubileo, y él te venderá a un precio proporcional al número de años que queden por cosechar. 16 Si aún faltan muchos años para el jubileo, aumentarás el precio en la misma proporción; pero si faltan pocos, rebajarás el precio proporcionalmente, porque lo que se te está vendiendo es solo el número de cosechas. 17 No se explotarán los unos a los otros, sino que temerán a su Dios. Yo soy el Señor su Dios.

Consecuencias de la obediencia

18 »Pongan en práctica mis estatutos, observen mis leyes y habitarán seguros en la tierra. 19 La tierra dará su fruto, y comerán hasta saciarse, y allí vivirán seguros. 20 Si acaso se preguntan: “¿Qué comeremos en el séptimo año si no plantamos ni cosechamos nuestros productos?”, 21 déjenme decirles que en el sexto año les enviaré una bendición tan grande que la tierra producirá como para tres años. 22 Cuando ustedes siembren durante el octavo año, todavía estarán comiendo de la cosecha anterior, y continuarán comiendo de ella hasta la cosecha del año siguiente.

Leyes sobre el rescate de propiedades

23 »La tierra no se venderá a perpetuidad, porque la tierra es mía y ustedes no son aquí más que extranjeros y huéspedes. 24 Por tanto, en el país habrá la posibilidad de recobrar todo terreno que haya sido heredad familiar.

25 »En el caso de que uno de tus compatriotas se empobrezca y tenga que vender parte de su heredad familiar, su pariente más cercano rescatará lo que su hermano haya vendido. 26 Si el hombre no tiene a nadie que pague el rescate a su favor, pero él mismo llega a prosperar y consigue lo suficiente para rescatar su propiedad, 27 deberá calcular el número de años transcurridos desde la venta y reembolsar el saldo a quien se la haya comprado. Así podrá volver a su heredad. 28 Pero si no consigue lo suficiente para rescatarla, la tierra quedará en posesión del comprador hasta el año del jubileo, cuando el que la vendió la recobrará y esta volverá a su heredad familiar.

29 »Si alguno vende una casa en una ciudad amurallada, tendrá derecho a rescatarla durante un año completo a partir de la fecha de venta. Ese es el tiempo que dura su derecho a rescatarla. 30 Si no rescata la casa antes de cumplirse el año, no se le devolverá en el jubileo, sino que pasará a ser propiedad perpetua del comprador y de sus descendientes. 31 Las casas que estén en aldeas sin murallas se considerarán campo abierto, pero podrán rescatarse y se devolverán en el jubileo.

32 »Los levitas tendrán siempre el derecho de rescatar sus casas en las ciudades de su heredad. 33 Si alguno de los levitas hace valer su derecho, la casa que vendió en una de sus ciudades se le devolverá en el jubileo, porque las casas en las ciudades de los levitas son su heredad familiar entre los israelitas. 34 Pero los campos alrededor de sus ciudades no se venderán, pues son su propiedad inalienable.

35 »Si alguno de tus compatriotas se empobrece y no tiene cómo sostenerse, ayúdalo como lo harías con el extranjero o con el residente temporal; así podrá seguir viviendo entre ustedes. 36 No exigirás interés cuando prestes dinero, sino que temerás a tu Dios; así tu compatriota podrá seguir viviendo entre ustedes. 37 Tampoco prestarás dinero con intereses ni le impondrás recargo a los alimentos que le fíes. 38 Yo soy el Señor su Dios, que los saqué de Egipto para darles la tierra de Canaán y para ser su Dios.

39 »Si alguno de tus compatriotas se empobrece y se ve obligado a venderse a ti, no lo hagas trabajar como esclavo. 40 Trátalo como al jornalero o como al residente temporal que vive entre ustedes. Trabajará para ti, solo hasta el año del jubileo. 41 Entonces lo pondrás en libertad junto con sus hijos, y podrán volver a su propia familia y a la heredad de sus antepasados. 42 Todos los israelitas son mis siervos. Yo los saqué de Egipto, así que no serán vendidos como esclavos. 43 No serás un amo cruel, sino que temerás a tu Dios.

44 »Asegúrate de que tus esclavos y esclavas provengan de las naciones vecinas; allí podrás comprarlos. 45 También podrás comprar esclavos nacidos en tu país, siempre y cuando sean de las familias extranjeras que vivan temporalmente en medio de ustedes. Ellos serán propiedad de ustedes, 46 y podrán dejárselos a sus hijos como herencia para que les sirvan de por vida. En lo que respecta a tus compatriotas, no serás un amo cruel.

47 »Si un extranjero residente entre ustedes se enriquece, y uno de tus compatriotas se empobrece y tiene que venderse a ese extranjero o a un familiar de ese extranjero, 48 no perderá su derecho a ser rescatado después de haberse vendido. Podrá rescatarlo cualquiera de sus parientes: 49 un tío, un primo o cualquier otro de sus parientes. Y, si llegara a prosperar, él mismo podrá pagar su rescate. 50 Él y su dueño calcularán el tiempo transcurrido, desde el año en que se vendió hasta el año del jubileo. El precio de su liberación se determinará en proporción a la paga de un jornalero por ese número de años. 51 Si aún faltan muchos años, pagará por su rescate una suma proporcional a la que se pagó por él. 52 Si solo faltan pocos años para el jubileo, calculará y pagará por su rescate en proporción a esos años. 53 Ustedes vigilarán que su dueño lo trate como a los que trabajan por contrato anual, y que no lo trate con crueldad.

54 »Si tu compatriota no es rescatado por ninguno de esos medios, tanto él como sus hijos quedarán en libertad en el año del jubileo. 55 Los israelitas son mis siervos. Yo los saqué de Egipto. Yo soy el Señor su Dios.

Bendiciones de la obediencia

26 »No se hagan ídolos, ni levanten imágenes ni piedras sagradas. No coloquen en su territorio piedras esculpidas, ni se postren ante ellas. Yo soy el Señor su Dios.

»Observen mis sábados y muestren reverencia por mi santuario. Yo soy el Señor.

»Si se conducen según mis estatutos y obedecen fielmente mis mandamientos, yo enviaré lluvia a su tiempo, y la tierra y los árboles del campo darán sus frutos; la trilla durará hasta la vendimia, y la vendimia durará hasta la siembra. Comerán hasta saciarse y vivirán seguros en su tierra.

»Yo traeré paz al país y ustedes podrán dormir sin ningún temor. Quitaré de la tierra las bestias salvajes y no habrá guerra en su territorio. Perseguirán a sus enemigos y ante ustedes caerán a filo de espada. Cinco de ustedes perseguirán a cien, y cien de ustedes perseguirán a diez mil, y ante ustedes sus enemigos caerán a filo de espada.

»Yo les mostraré mi favor. Yo los haré fecundos. Los multiplicaré y mantendré mi pacto con ustedes. 10 Todavía estarán comiendo de la cosecha del año anterior cuando tendrán que sacarla para dar lugar a la nueva. 11 Estableceré mi morada en medio de ustedes y no los aborreceré. 12 Caminaré entre ustedes. Yo seré su Dios y ustedes serán mi pueblo. 13 Yo soy el Señor su Dios que los saqué de Egipto para que dejaran de ser esclavos. Yo rompí las varas de su yugo y los hice caminar con la cabeza erguida.

Maldiciones de la desobediencia

14 »Si ustedes no me obedecen ni ponen por obra todos estos mandamientos, 15 sino que desprecian mis estatutos, aborrecen mis leyes y dejan de poner por obra todos mis mandamientos, rompiendo así mi pacto, 16 entonces yo mismo los castigaré con un terror repentino, con enfermedades y con fiebre que los debilitarán, les harán perder la vista y acabarán con su vida. En vano sembrarán su semilla, porque se la comerán sus enemigos. 17 Yo les negaré mi favor y sus adversarios los derrotarán. Sus enemigos los dominarán y ustedes huirán sin que nadie los persiga.

18 »Si después de todo esto siguen sin obedecerme, siete veces los castigaré por sus pecados. 19 Yo quebrantaré su orgullo y terquedad. Endureceré el cielo como el hierro y la tierra como el bronce, 20 por lo que en vano agotarán sus fuerzas, y ni el suelo ni los árboles del campo darán sus frutos.

21 »Si a pesar de esto siguen oponiéndose a mí y se niegan a obedecerme, siete veces los castigaré por sus pecados. 22 Lanzaré sobre ustedes fieras salvajes que arrebatarán sus hijos y destruirán su ganado. De tal manera los diezmarán que sus caminos quedarán desiertos.

23 »Si a pesar de todo esto no aceptan mi disciplina, sino que continúan oponiéndose a mí, 24 yo también seguiré oponiéndome a ustedes. Yo mismo los heriré siete veces por sus pecados. 25 Dejaré caer sobre ustedes la espada de la venganza prescrita en el pacto. Cuando se retiren a sus ciudades, les enviaré una plaga y caerán en poder del enemigo. 26 Cuando yo destruya la provisión de pan, diez mujeres hornearán para ustedes pan en un solo horno. Y lo distribuirán racionado, de tal manera que comerán, pero no se saciarán.

27 »Si a pesar de esto todavía no me obedecen, sino que continúan oponiéndose a mí, 28 entonces yo también en mi ira me opondré a ustedes. Siete veces los castigaré por sus pecados, 29 y tendrán que comerse la carne de sus hijos y de sus hijas. 30 Destruiré sus altares paganos, demoleré sus altares de incienso y amontonaré sus cadáveres sobre las figuras sin vida de sus ídolos. Volcaré mi odio sobre ustedes; 31 convertiré en ruinas sus ciudades y asolaré sus santuarios. No me complaceré más en el aroma de sus ofrendas, que me era grato. 32 De tal manera asolaré al país que sus enemigos que vengan a ocuparlo quedarán atónitos. 33 Los dispersaré entre las naciones: desenvainaré la espada, los perseguiré hasta dejar desolada su tierra y en ruinas sus ciudades. 34 Entonces la tierra disfrutará de sus años sabáticos todo el tiempo que permanezca desolada, mientras ustedes vivan en el país de sus enemigos. Así la tierra descansará y disfrutará de sus sábados. 35 Mientras la tierra esté desolada, tendrá el descanso que no tuvo durante los años sabáticos en que ustedes la habitaron.

36 »En cuanto a los que sobrevivan, tan profundo será el temor que les infundiré en tierra de sus enemigos, que hasta el susurro de una hoja movida por el viento los pondrá en fuga. Correrán como quien huye de la espada y caerán sin que nadie los persiga. 37 Como si huyeran de la espada, tropezarán unos con otros sin que nadie los persiga y no podrán hacerles frente a sus enemigos. 38 Perecerán en medio de las naciones; el país de sus enemigos los devorará. 39 Aquellos de ustedes que sobrevivan serán abatidos en país enemigo, porque a sus pecados se añadirá el de sus antepasados.

40 »Pero si confiesan su maldad y la de sus antepasados —su traición y constante oposición contra mí, 41 que me obligaron a enviarlos al país de sus enemigos— y abandonan su terquedad,[b] se humillan y reconocen su pecado, 42 entonces me acordaré de mi pacto con Jacob, Isaac y Abraham; también me acordaré de la tierra. 43 Al abandonar ellos la tierra, esta disfrutará de sus sábados mientras permanezca deshabitada. Pero tendrán que reconocer sus pecados, por cuanto rechazaron mis leyes y aborrecieron mis estatutos. 44 A pesar de todo y, aunque estén en la tierra de sus enemigos, no los rechazaré ni los aborreceré hasta el punto de exterminarlos; tampoco romperé mi pacto con ellos. Yo soy el Señor su Dios. 45 Antes recordaré en su favor el pacto que hice con sus antepasados, a quienes, a la vista de las naciones, saqué de Egipto para ser su Dios. Yo soy el Señor».

46 Estos son los estatutos, ordenanzas y leyes que, por medio de Moisés, estableció el Señor en el monte Sinaí entre él y los israelitas.

Rescate de las ofrendas al Señor

27 El Señor ordenó a Moisés: «Habla a los israelitas y diles: “Cuando alguien quiera hacerle al Señor una promesa especial equivalente al valor de una persona, se aplicará el siguiente cálculo:

»”Por los varones de veinte a sesenta años se pagarán cincuenta siclos[c] de plata, según el peso oficial[d] del santuario.

»”Por las mujeres se pagarán treinta siclos[e] de plata.

»”Por los varones de cinco a veinte años se pagarán veinte siclos de plata, y diez siclos[f] por las mujeres de la misma edad.

»”Por los niños de un mes a cinco años se pagarán cinco siclos de plata, y tres siclos[g] por las niñas de la misma edad.

»”Por los varones mayores de sesenta años se pagarán quince siclos de plata, y diez siclos[h] por las mujeres de la misma edad. Si quien hace la promesa es tan pobre que ni el precio estipulado puede pagar, se le hará comparecer ante el sacerdote, el cual fijará el valor a pagar, según los recursos de quien haga la promesa.

»”Si lo que se presenta como ofrenda al Señor es un animal, este quedará consagrado por haber sido ofrecido al Señor. 10 No podrá cambiarse ni sustituirse un animal bueno por uno malo; tampoco un animal malo por uno bueno. Si se cambia un animal por otro, ambos quedarán consagrados. 11 Si lo que se presenta como ofrenda al Señor es un animal impuro, se llevará el animal ante el sacerdote, 12 quien determinará el valor del animal. El cálculo aplicado por el sacerdote deberá aceptarse, cualquiera que este sea. 13 Si el dueño quiere rescatar el animal, deberá añadir una quinta parte al valor que haya fijado el sacerdote.

14 »”Si alguno consagra su casa al Señor, el sacerdote determinará su valor. El cálculo aplicado por el sacerdote deberá aceptarse, cualquiera que este sea. 15 Si el que consagró su casa quiere rescatarla, deberá añadir una quinta parte al valor que haya fijado el sacerdote, y la casa volverá a ser suya.

16 »”Si alguno consagra al Señor parte del campo de su heredad familiar, su precio se determinará según la cantidad de semilla que se requiera para sembrarlo, a razón de cincuenta siclos de plata por cada jómer[i] de semilla de cebada. 17 Si consagra su campo a partir del año del jubileo, dicho precio se mantendrá; 18 pero si lo consagra después del jubileo, el sacerdote hará el cálculo según el número de años que falten para el próximo jubileo, con el descuento correspondiente. 19 Si el que consagra su campo realmente quiere rescatarlo, deberá añadir una quinta parte al valor que haya fijado el sacerdote, y el campo volverá a ser suyo. 20 Pero si no lo rescata o se lo vende a otro, ya no podrá rescatarlo. 21 Cuando en el jubileo el campo quede libre, será consagrado como campo reservado para el Señor, y pasará a ser propiedad del sacerdote.

22 »”Si alguno compra un campo que no sea parte de su heredad familiar y lo consagra al Señor, 23 el sacerdote determinará su precio según el tiempo que falte para el año del jubileo. Ese mismo día, el que consagra el campo pagará el monto de su valor. Es algo consagrado al Señor. 24 En el año del jubileo, el campo volverá a ser parte de la heredad familiar de su dueño anterior. 25 Todo precio se fijará según la medida oficial del santuario, veinte guerás[j] por cada siclo.

26 »”Sin embargo, nadie podrá consagrar la primera cría de su ganado, sea de res o de oveja, pues por derecho las primeras crías pertenecen al Señor. 27 Si se trata de animales impuros, se podrán rescatar pagando el valor fijado por el sacerdote, más una quinta parte. Si no se rescata, se venderá en el precio que el sacerdote haya fijado.

28 »”Nadie podrá vender ni rescatar sus bienes, sean hombres, animales o campos, si los ha consagrado como propiedad exclusiva del Señor. Todo cuanto se consagra como propiedad exclusiva del Señor es cosa santísima.

29 »”Ninguna persona así consagrada podrá ser rescatada, sino que será condenada a muerte.

30 »”El diezmo de todo producto del campo, ya sea grano de los sembrados o fruto de los árboles, pertenece al Señor, pues le está consagrado. 31 Si alguien desea rescatar algo de su diezmo, deberá añadir a su valor una quinta parte. 32 En cuanto al diezmo del ganado mayor y menor, uno de cada diez animales contados[k] será consagrado al Señor. 33 El pastor no hará distinción entre animales buenos y malos ni hará sustitución alguna. En caso de cambiar un animal por otro, los dos quedarán consagrados y no se les podrá rescatar”».

34 Estos son los mandamientos que el Señor dio a Moisés para los israelitas en el monte Sinaí.

Footnotes

  1. 25:2 un año de reposo. Lit. un sábado; también en vv. 4-6.
  2. 26:41 terquedad. Lit. su incircunciso corazón. En la Biblia, corazón se usa para designar el asiento de las emociones, pensamientos y voluntad, es decir, el proceso de toma de decisiones del ser humano.
  3. 27:3 Es decir, aprox. 575 g.
  4. 27:3 el peso oficial. Lit. el siclo; también en v. 25.
  5. 27:4 Es decir, aprox. 345 g.
  6. 27:5 veinte siclos … diez siclos. Es decir, aprox. 230 g … 115 g.
  7. 27:6 cinco siclos … tres siclos. Es decir, aprox. 58 g … 35 g.
  8. 27:7 quince siclos … diez siclos. Es decir, aprox. 172 g … 115 g.
  9. 27:16 Es decir, aprox. 160 kg.
  10. 27:25 Es decir, aprox. 11.5 g.
  11. 27:32 contados. Lit. que pasen bajo la vara del pastor.