Add parallel Print Page Options

26 Entonces ellos cargaron el grano sobre sus asnos y se fueron de allí.

27 Cuando se detuvieron para pasar la noche, uno de ellos abrió su costal para dar de comer a su asno y vio que su dinero estaba allí, en la boca del costal. 28 Entonces dijo a sus hermanos:

— ¡Me han devuelto el dinero! Mirad, ¡aquí está en mi costal!

Se les encogió el corazón del susto y se decían unos a otros temblando:

— ¿Qué es esto que Dios nos ha hecho?

Read full chapter